Este libro es un desafío a la España Invertebrada de Ortega y Gasset. «España se va deshaciendo, deshaciendo (desde el siglo XVI)... Hoy ya es más bien que un pueblo, la polvareda que queda...», afirma Ortega. Jáuregui, cuya obra elogiada por premios Nobel ya ha sido traducida al inglés, al chino y a otros idiomas, afirma que desde la Dama de Elche al Peine del viento de Chillida, desde Berceo hasta Lorca, desde las pinturas de Altamira hasta el Guernica de Picasso, desde las Cantigas de Alfonso X el Sabio al concierto de Aranjuez, desde Don Quijote a La Familia de Pascual Duarte, España sigue haciéndose, haciéndose... La pregunta clave de la identidad de España según el autor es esta: ¿Qué faltaría al Patrimonio de la Humanidad, si no hubiese existido España? Faltarían California, Florida, Texas, Los Ángeles, Argentina, México... faltaría un idioma glorioso en el que cuatrocientos millones hablan, cantan, rezan... El autor sostiene que, incluso los nacionalistas que proclaman su condición de no-españoles, no pueden desespañolizar su cerebro ni sus adicciones a la paella, al jerez, a las fiestas y a otros productos de denominación de origen ibérico. Escrito con un estilo ameno y salpicado de anécdotas sabrosas, es un libro que se lee con deleite, mientras se descubre una España tan vertebrada que no han podido destruirla los que lo han intentado a día de hoy.