Los escritos que componen el texto tienen un contenido específicamente urbano. Por ello, era necesario tratar de descubrir elementos propios de esta disciplina, que han caracterizado y homologado a los espacios urbanos y metropolitanos. La conclusión es que las redes ferroviarias metropolitanas y el futuro metro europeo son las claves. La alteración que provocan en la comarca permiten hacer una lectura matemático geométrica de estos ámbitos territoriales. Bilbao ha entrado en el nuevo siglo en plena transformación ferroviaria, iniciativa que modificará nuestra percepción espacio temporal de los entornos comarcal y regional. Una apuesta certera del plan de 1995 fue la reformulación férrea, que incluía entre otras operaciones la red de metro. Hoy Bilbao es la tercera ciudad del estado en número de usuarios de esta infraestructura. Esta afirmación tiene una especial relevancia cuando descubrimos que Madrid y Barcelona pertenecen al conjunto de las diez ciudades europeas que disponen de una red de metro próxima o por encima de los 100 km. lineales, circunstancia que las convierte en nodos básicos del tren de alta velocidad europeo. El nuevo plan general para Bilbao no puede olvidar una importante mejora y extensión de la red de metro, que obligatoriamente deberá venir apoyada en la creación de nuevos espacios urbanos con intensidad suficiente para justificar la rentabilidad de la infraestructura ferroviaria. El Bilbao de 2061 pertenecerá, sin duda, a la red de espacios curvos metropolitanos trasnacionales de la Unión Europea.