Sophia Torres, de familia puertorriqueña, es quien nos cuenta la historia en este segundo volumen de la colección. Hija de una enfermera y de un padre ejecutivo, su abuela también vive con ellos. Sophia tiene tres hermanas pequeñas, de 8, 6 y 2 años. La protagonista, a quien le encanta el deporte, ha sido seleccionada para ayudar al entrenador de futbol. Como continuación de la anterior obra de la colección, en este momento el grupo de las cuatro chicas (Lucy –de raza de color; Maya Chung –de origen chino, Erin –de raza caucásica-, y ella misma, Sophia, cuya familia son inmigrantes puertorriqueños) se reúne para hablar de la Hakathon que tendrá lugar el próximo sábado. Cuando se encuentran charlando y tomando algo en la cafetería del barrio, entra Leila, una chica que también acude al Club de Programación de la escuela y que está asignada a otro grupo. Les explica que no podrá participar porque los integrantes de su equipo han tenido que marcharse. Las chicas protagonistas, apenadas por Leila le piden si quiere formar parte su grupo y ella acepta. De familia inmigrante pakistaní, lleva un tiempo en los Estados Unidos y tiene claro que de mayor quiere ser fabricante de robots. Una niña más, pues, se une al grupo.