"Hay algo que me ha impresionado en este texto y que nos va a ayudar a sentirnos mas jóvenes. Y es la hermosa pregunta que se le hace a un prejubilado de 60 años: ¿Y tu qué quieres ser de mayor? Puede sonar a fantasía, pero esa realidad la vamos a ver dentro de muy poco tiempo, y especialmente, si se aplica toda la filosofía y toda la ciencia que se recoge en estas páginas. La edad la marca el cerebro y no los años. Y esta verdad solemos aceptarla demasiado tarde. Ese es nuestro error, porque a envejecer se aprende. Y quizá una de las asignaturas básicas sea esta que tiene ahora en sus manos en forma de libro, porque como dice su autor el elixir de la eterna juventud no hay que buscarlo entre pócimas misteriosas ni ungüentos extraños, está en nosotros mismos. Lo que este libro viene a demostrar es que podemos detener la velocidad del envejecimiento, y que en buena parte depende de cuando empecemos a preocuparnos por la vejez. Lea, estudie este libro, y aplique los primeros consejos para tener hábitos saludables. Estas páginas nos proporcionan, además, una inyección de optimismo". Del prólogo.—Ramón Sánchez-Ocaña