Este libro está destinado a todos aquellos que desean enriquecer sus conocimientos sobre la actividad traductora durante la Edad Media, ya sean investigadores o traductores curiosos por adentrarse en los albores de la profesión traductológica en lengua castellana, y esperamos que llegue a ser un libro de referencia. El volumen recoge diez trabajos en torno a la actividad traductora de este periodo, especialmente en el ámbito castellano pero no de forma exclusiva, pues incluye también incursiones en el gallego, el catalán y el italiano.