Francisco Franco consideró la Guerra Civil como una lucha «entre los hijos del mismo pueblo, de la misma madre patria» y a él mismo, como «jefe y salvador de la patria» encontrando en España una mujer, madre e indefensa. En cuerpo y alma aborda la relación simbólica entre el estado dictatorial de Franco y el cuerpo alegórico femenino de la nación. Trata la utilización metafórica de las imágenes sexuadas o denominadas «de género» en el discurso político, desde el primer periodo autárquico de la década de los cuarenta hasta los años del «consumismo» y el «aperturismo» que habrían de sucederle a finales de los cincuenta y los sesenta. En esta metáfora orgánica de la nación, en la que la «nación» se transmuta en la figura física de una «mujer» con todas sus cualidades (maternidad, vulnerabilidad, fertilidad), los cuerpos de las mujeres vendrán a desempeñar un papel central en el imaginario político, y el control de esos cuerpos se torna en herramienta esencial del «biopoder» del régimen para la consecución de sus fines totalitarios.