Se trata de un diccionario de autor –lleno de caprichos y curiosidades, también de ausencias y lagunas, y que incurre en inevitables y sugerentes circunloquios, saltos de una lengua a otra y alguna que otra reiteración– que propone un amplio y detallado viaje por la cultura irlandesa, en decenas de entradas, adaptable al ritmo y voluntad de cada cual: de los monumentos megalíticos a los deportes gaélicos; de la emigración que desoló pueblos enteros a los asentamientos en otros continentes; de los protagonistas de viejas epopeyas a los poetas actuales; de los románticos dirigentes del siglo XIX a los revolucionarios del siglo XX.