Un velero inglés queda embarrancado en los bajíos de una recóndita costa malaya. A bordo, un aristocrático matrimonio inglés y un caballero español confían en que algún buque los rescate y los ponga a flote. Ignoran que, ocultos en la espesura de la selva que empieza en la misma orilla, se concentran guerreros a la espera de iniciar una guerra contra el país de Wajo. Un bergantín, bajo el mando del capitán Lingard, aventurero y comerciante inglés que lleva años recorriendo aquellas costas, avista la nave encallada y trata de ayudarles sin comprometer sus propios objetivos. Sin embargo, algo turba los propósitos de Lingard: la fascinación que instantáneamente ejerce sobre él la dama del velero. Conrad no acabó la redacción de El rescate hasta muchos años después de haberla iniciado. Él mismo reconoció haber encallado en ella tal como el navío inglés lo hizo en los bajíos. Y es comprensible: difícilmente un joven Conrad podría haber tenido la madurez necesaria para describir la relación que se establece entre Lingard y la casada Sra. Travers, una relación marcada por un amor que no se expresa más que subrepticiamente. Novela de amor y de aventuras, El rescate es un alto exponente del talento de Conrad para describir personajes, y de su sutileza cuando se trata de describir sentimientos semiocultos y pasiones soterradas que pugnan por salir a un mundo en el que las convenciones sociales tratan de imponer sus rígidas normas, incluso en los confines de las selvas malayas. Joseph Conrad (1857-1924), nació en la ciudad polaca de Berdichev, ahora perteneciente a Ucrania. Su padre, de quien heredaría el amor a la literatura, pertenecía a la nobleza polaca. Jósef Teodor Konrad Korzeniowski (ese era el verdadero nombre de Conrad) quedó huérfano a los 12 años, y a los 16 abandonó su Polonia natal, ocupada por los rusos, para trasladarse a Marsella. Para pagarse el viaje se enroló en un barco, y ahí empezaría un periplo de veinte años viajando por todo el mundo. Luchó en España en las guerras carlistas, con las tropas de don Carlos. Nacionalizado británico en 1886, escribió su obra en lengua inglesa. Políglota, además de poseer un perfecto conocimiento del idioma inglés, hablaba ruso y francés, y naturalmente, el polaco. En 1895, año en que publicaría su primera novela, La locura de Almayer, contrajo matrimonio con Jessie George. Murió en Bishopsbourne, cerca de Canterbury. Entre sus obras más importantes destacan Lord Jim, El corazón de las tinieblas, Nostromo, El rescate, Azar y El negro del Narcisus.