La libertad no es el orden «natural» de las cosas. En la mayoría de lugares y en la mayoría de casos, los fuertes han dominado a los débiles y la libertad humana ha sido anulada por la fuerza o por las costumbres y normas. O los estados han sido demasiado débiles para proteger a los individuos de estas amenazas, o los estados han sido demasiado fuertes para que las personas se protejan contra el despotismo. Únicamente cuando se logra un equilibrio delicado y precario entre el estado y la sociedad, logra emerger la libertad. De los autores del bestseller internacional Por qué fracasan los países, llega un nuevo libro crucial que responde a la pregunta de cómo florece la libertad en algunos estados, mientras cae en el autoritarismo o la anarquía en otros. En medio de un momento de desestabilización desgarradora, necesitamos la libertad más que nunca, y, sin embargo, el corredor hacia la libertad se está volviendo más estrecho y más traicionero.