Esta obra, escrita en Londres en 1904, y cuya trama transcurre en la misma ciudad en 1984, es simultáneamente una fantasía futurista, una sátira política, un cuento profético y una novela desbordante de poesía, inteligencia, aventuras, y humor. En ella, dos personajes contrapuestos y complementarios libran, cada uno a su manera, una batalla contra la inercia de una época que ha perdido la fe en las revoluciones. En su día exaltó, y hoy y siempre exaltará, al máximo, a quienes tengan hambre y sed de utopía. Bajo el manto regio de la imaginación de Chesterton se ocultan los fundamentos de un humanismo y un romanticismo radicales.