El filósofo y escritor Feliciano Mayorga se atreve a proponer en este ensayo, de un modo directo y comprensible, que todo aquello que llamaos bueno, tanto en las personas como en las instituciones, procede de una raíz común a la que denomina provocadoramente fórmula del bien, y que puede ser expresada en tan solo doce palabras. La audacia de este planteamiento ha sido resaltada por el prestigioso filósofo Javier Muguerza Carpintier, quien dice textualmente: «El autor de El mito de la colmena, que festeja el hallazgo de una fórmula del bien, plantea un reto tan desmesurado en términos éticos como el que Arquímedes, a propósito de la palanca, planteó en términos físicos: “Dadme un punto de apoyo y moveré el mundo”; nadie, joven o maduro, debería regatear a nuestro autor dicho apoyo, en la seguridad de que no dejará de conmover a quien le lea». La claridad, estilo directo y sentido de humor que impregna el texto lo han convertido en lectura obligada para muchos jóvenes de nuestro país. El mito de la colmena está prologodo por el filósofo Augusto Klappenbach e ilustrado por Miguel Angulo.