Es la historia de un club que se fundó en un café y de una camiseta que vino de Inglaterra. Y la de cientos de jugadores que eligieron defenderla. Es la historia de copas ganadas y de finales perdidas. Y de un partido que se jugó bajo la nieve. De palomas que anunciaban goles y de un hincha que se rompía una botella en la cabeza cada vez que se marcaba uno. Es la historia de un futbolista que se convirtió en tribuna. Y la de un jugador que fue entrenador. Y la de una gabarra que surcó la ría. La historia del Athletic Club es inabarcable. Más de cien años de leyenda. De un modelo único.