El nacimiento de unos media diferentes a los que habían predominado durante miles de años supusieron una auténtica revolución en el mundo de la comunicación. Aparentemente más cercanos al entorno cotidiano que los que estaban basados en las distintas formas de expresión verbal, pronto se vio el peligro que podría suponer su capacidad para modificar la percepción de la realidad y su poder para alterar sentimientos, emociones e inducir a la acción. El libro de la imagen estudia los principios que rigen estos medios de carácter marcadamente visual. Tras una serie de consideraciones sobre las distintas teorías de la imagen y su relación con la realidad y el pensamiento visual, Juan Carlos Sanz se detiene en los aspectos básicos de los lenguajes icónicos: pictórico, gráfico, fotográfico, cinematográfico, etc., con el fin de delimitar su especificidad. El estudio de la luz, el color y la textura, elementos espacio-temporales, sirve de introducción al análisis de la forma, el contraste y la composición, trilogía que debe estar presente en cualquier mensaje visual eficiente. El texto, de gran utilidad para estudiantes de comunicación, arte y diseño, se completa con un glosario y una bibliografía en castellano.