El laberinto de las luciérnagas es un libro que responde a una visión muy singular. Sin dejar de ser personal, sabe comunicar un mensaje de esperanza en un mundo mejor para la humanidad. «Pero para conseguirlo, en cada ser humano debe despertar esa conciencia universal. No somos sólo yo sino la suma de todos y todo lo que existe, lo visible y lo invisible», dice la autora. El libro se divide en dos partes: la primera corresponde a nuestro origen y la segunda a la revelación que nos explica hacia dónde se dirige nuestra humanidad. En medio de un laberinto de ideas y actitudes, las luciérnagas avanzan en medio de la noche despertando a los que hoy todavía duermen. El libro es abierto, no se ciñe a ninguna religión en particular y las abarca todas, y sin embargo nos muestra como la espiritualidad y la sencillez viven dentro de la cotidianidad de la vida.