Todo empezó cuando una de las gallinas de la granja de Nate puso un huevo diferente. Muy grande. Enorme, comparado con la mayoría de los huevos de gallina. Y, tras una espera que se hizo eterna, el cascarón empezó a romperse y del huevo salió... Pero ¿qué era aquello? Si no fuera porque era imposible, Nate habría dicho que parecía un pequeño dinosaurio.