El Dr. Bob Rotella es el célebre psicólogo de golf de los mejores jugadores del mundo ha ayudado a estrellas del golf tales como Keegan Bradley, Padraig Harrington y Darren Clark, y ha ofrecido sus consejos a golfistas de todos los niveles en sus exitosos libros El golf no es el juego de la perfección El golf es el juego de la confianza, entre otros. En El golfista imparable aborda el papel de la mente en el aspecto más difícil del golf: el juego corto. No es un secreto que más de dos terceras partes de los golpes que da un golfista son golpes cortos: pats, chips y pitches. Los drives largos podrían cosechar aplausos, pero si un golfista quiere ganar el Masters o simplemente a un amigo en el partido del sábado por la mañana, son los pequeños golpes los que marcan la diferencia. Con todo, hay muchos jugadores que o bien no logran reconocer, o bien prefieren ignorar la importancia del juego corto. En este libro el Dr. Rotella aplica la misma sabiduría y experiencia que ha funcionado con clientes tales como Davis Love III y Graeme McDowell, para ayudar a los golfistas a dominar este arte especial de los golpes cortos y eliminar todas las frustraciones de este elemento tan desafiante del juego. El juego corto requiere extraordinarios niveles de concentración, y provoca mucho temor a los amateurs y a los profesionales. En El golfista imparable, el Dr. Rotella enseña a los lectores a superar ese miedo usando la mente para lograr un estado de calma en el que solo hay un centro de atención: el hoyo. Rotella comparte historias de profesionales con los que ha trabajado y que han dominado el aspecto psicológico del pat y añade reglas y prácticas simples, pero duras de seguir, que mejorarán el juego de cualquier golfista: permanecer centrado en el objetivo, visualizar el golpe, aplicar la rutina y aceptar completamente lo que le suceda a la bola de golf. Además de citar sus experiencias con golfistas, el Dr. Rotella también demuestra que la ciencia de la memoria y el conocimiento del funcionamiento de la mente sobre todo en aquellas áreas relacionadas con tareas físicas pueden mejorar notablemente el juego, especialmente el golpe de bunker, o al jugar un pat largo. Tanto para los golfistas ocasionales como para los de mayor dedicación, un juego corto mejor proporciona uno de los placeres esenciales del golf; un placer que conocerán entrenando la mente, lo que les permitirá convertirse en golfistas imparables.