El poemario El Espejo roto de Alicia no obedece a unidad temporal o temática sino que, con la fragmentación propia de un espejo roto, ofrece retazos de vida vivida o imaginada, soñada o testimoniada. Los capítulos en que se ha dividido el poemario corresponden a tonos y colores bajo los cuales la autora ha querido colocar vivencias, pensamientos, instantes y sentimientos que van del enigmático arco iris al negro de la noche noche pasando por otros varios: blanco, gris, azul, rayo verde, nácar, opalescente, iridiscente, ocre, violeta, etc... Reflexión sobre la soledad humana, la violencia, el mal y los males, la angustia, los terrores del S.XX , la devastación de la naturaleza, entre los que surge a veces la luz de la esperanza y el amor.