Es uno de los escultores más activos en la etapa posterior a la Guerra Civil, participando activamente en la restauración de imágenes religiosas dañadas porel conflicto del 1936. Sus obras extienden por numerosos pueblos andaluces, extremeños, castellanos y vascos, siguiendo las líneas de los grandes maestros del Siglo de Oro de la imaginería sevillana. Cultivó también la pintura, la talla de retablos, el diseño de pasos procesionales, la pintura mural para decoración de capillas, etc.]