El deporte facilita la mejor plataforma publicitaria para promocionar los bienes, productos o servicios de las empresas y entidades, por los beneficios que reporta la asociación de la imagen corporativa a la importancia social, la emotividad que despierta, los valores que lo caracterizan y la singularidad de sus principales protagonistas. Por esta razón, la financiación del deporte que se sirve de la publicidad constituye una opción óptima alternativa a la subvención tradicional. . Aunque el incentivo de los mecanismos de financiación de las actividades deportivas que se benefician de la conexión con su difusión a través del deporte constituye un principio rector que ha venido informando diversas Leyes del Deporte autonómicas desde los años 90, el empleo de estos diversos instrumentos de contenido publicitario o divulgativo por particulares y Administraciones suscita problemas e interrogantes para los que el ordenamiento jurídico no brinda una fácil respuesta en la práctica. . El presente trabajo aborda el estudio del contrato de patrocinio publicitario, a partir de los trazos peculiares que le confiere su concertación en el contexto del deporte y con base en la jurisprudencia y la doctrina administrativista que marcan la tendencia actual en este ámbito. La necesidad de distinguir este contrato atípico de las figuras alternativas de impulso del deporte a las que se aproxima ha ameritado, asimismo, la oportuna aproximación a los mecanismos de financiación con componente publicitario o divulgativo cuando el patrocinador es una Administración pública y al convenio de colaboración empresarial en actividades de interés general. El estudio interdisciplinario de las cuestiones que afectan los mecanismos alternativos de financiación del deporte referidos hace de El contrato de patrocinio deportivo una fuente de consulta imprescindible para los operadores jurídicos. .