La variada carrera de Ernst Lubitsch es a menudo desglosada en períodos para enfatizar el amplio espectro de su talento: actor de teatro en su Berlín natal, jefe de producción de la Paramount, el hombre que hizo reír a Greta Garbo... Aunque la mayor parte de su fabulosa trayectoria tuvo lugar durante la época muda, fue el impacto de sus films sonoros lo que le valió el reconocimiento definitivo