En un bar de mala muerte de Filadelfia, un hombre entra por la puerta huyendo y fuera de sí. Busca al pianista, a Eddie, a su hermano, al mismo que lleva años sin ver y al que pide refugio. Eddie no quiere oírle, no quiere problemas. Pero cuando dos pistoleros penetran en aquel tugurio buscando a su presa no puede evitarlo y le ayuda a escapar. Eddie también deberá huir. Pero no lo hará solo, le acompañará Lena, una misteriosa camarera y la única persona en toda Filadelfia que conoce su verdadera identidad: él es Edward Webster Lynn, el concertista de piano que años antes había entusiasmado en el Carnegie Hall. ¿Por qué malvive ahora en un tugurio, solitario y ruin, empeñado en borrar de la faz de la tierra hasta la última brizna de su pasado? Maldita Lena, maldito Turley, por qué habrán despertado a Eddie de su apacible olvido... Ahora los mafiosos le amenazan y persiguen. ¿Qué puede hacer? Quizás ya es hora de despertar... La gran obra maestra de David Goodis no envejece, sigue siendo una de las más extraordinarias novelas del género negro, una de las más fascinantes novelas sobre el misterio de la vida.