Analiza posverdades mundializadas en obras por las cuales algunos discípulos serían maestros. ¿Hubo que esperar de 1996 a 2018 para reconocer el despeje generacional y movilidad entre nómadas y globalifóbicos? Se elucida esa cultura al conjugar los prescriptores de las novelas producidas: agentes, amistades gremiales, crítica habitual, editoriales independientes, entrevistadores, grupos de lectura, libreros, mecenas, prensa cultural, redes sociales, traductores, reseñadores; y cierto impulso profesoral de corregir políticamente.