El libro se inicia con una visión actualizada de la comprensión de la discapacidad intelectual y de las prácticas de evaluación e intervención interdisciplinar de acuerdo con las propuestas de la AAIDD (Asociación Americana de Discapacidades Intelectuales y del Desarrollo). Posteriormente se centra en analizar las habilidades de adaptación y las habilidades sociales, desarrollando una aproximación diferenciadora de ambos conceptos que permita aclarar la planificación de la evaluación e intervención con las personas con discapacidad intelectual. Se subraya la importancia de organizar los apoyos desde una perspectiva de evaluación de resultados personales en calidad de vida. En los últimos años se ha producido un gran avance en la comprensión de los trastornos psicológicos y en el desarrollo de los procedimientos de evaluación e intervención con las personas con discapacidad intelectual. Estas novedades se desarrollan en la segunda parte del libro, en la que se tratan los problemas de comportamiento y los trastornos psicológicos de las personas con discapacidad intelectual. Estas cuestiones son una de las preocupaciones más importantes para las familias y para los profesionales que trabajan directamente con ellas. La convivencia diaria con una persona que presenta graves problemas de comportamiento exige un grado de atención y control ambiental muy alto, lo que contribuye a generar mayores tensiones en el seno de la familia y en el entorno en el que vive el individuo.