En este libro se analiza, a través de la patología del sida en Bolivia, las luchas de distribución de poder entre organismos globales, empresas farmacéuticas y agroindustriales, así como los conflictos de intereses entre corporaciones. Es a través de las voces de sus protagonistas que se observa como la ideología y la política global se introducen en el Estado boliviano casi sin resistencia. El estudio se aventura a establecer una comparación entre la situación boliviana y la que ofrecen otros dos países: Chile, a través de Arica, la ciudad con el índice más alto de sida del país, y Sudáfrica, el país del mundo con más casos de sida. Las tres zonas que se comparan tienen en común contar con territorios con plantaciones transgénicas y un alto índice de contaminación en la tierra y el agua debido fundamentalmente a la extracción de minerales o hidrocarburos y la utilización de agrotóxicos en la producción agrícola.