Desde su fundación los jesuitas se dedicaron con ahínco a la propagación de la fe y las buenas costumbres en muy diversas naciones y lugares. Debido a ello las denominadas misiones populares constituyen un importante capítulo de su actividad apostólica. En este escrito se presentan y analizan, especialmente desde un punto de vista antropológico, las informaciones que los propios misioneros populares nos ofrecen en sus crónicas o diarios, rescatados sobre todo de diversos archivos jesuíticos, sobre su actividad en el territorio gallego. Tales informaciones, que se extienden cronológicamente a un amplio período de tiempo, ponen al descubierto, aunque sólo sea indirectamente, los modos de ser, pensar, sentir, vivir o comportarse, es decir, la cultura (en su sentido antropológico), de unas gentes que resultan ser en definitiva no poco distintas de los misioneros populares jesuitas que se acercan a ellas. Esta es la razón del encuentro-desencuentro del título de este estudio, el cual, debido a ello y más allá de la labor descriptiva, no dejará de apuntar, por lo mismo, hacia una determinada crítica del modo de ejercer la comunicación del mensaje cristiano a grupos o pueblos poseedores de una cultura distinta de la de sus evangelizadores.