La corrupción constituye sin duda alguna la más grave de las lacras de la sociedad de nuestros días, manifestación de la degradación de los valores morales en los que toda una civilización falta de valor moral amenaza con derrumbarse. Estamos, por tanto, ante una de esas crisis totales de las que solo se sale con una radical renovación personal y social y no con normas jurídicas. Lo que en modo alguno supone que hayamos de cruzarnos de brazos. Ni que despreciemos los esfuerzos de los Estados y Organismos internacionales para superar tan grave situación. Jesús González Pérez que hace años se ha preocupado por la moralización de la vida pública nos ofrece en la primera parte de este libro un panorama del fenómeno de la corrupción: su extensión, causas y reacciones a que dado lugar, tal y como se han proyectado en los Ordenamientos jurídicos. Se trata con más detalle que en la edición anterior los Ordenamientos supraestatales, en especial de las Convenciones ratificadas por España, los Ordenamientos de los Estados hispanoamericanos y, preferentemente, de la Unión europea. En la segunda parte se estudian las exigencias de la ética para intentar regenerar la vida pública y hacer una Administración pública que, no solo no suscite la desconfianza y el rechazo de los ciudadanos, sino que pueda servir de ejemplo a las actividades privadas, sin limitarse a sancionar el nauseabundo mundo de la corrupción y recordar otros elementales valores. Termina esta parte con dos capítulos, uno dedicado en general a las medidas legales para garantizar un comportamiento ético y otro a las medidas represivas. Si en la segunda parte se contemplaba la Ética como exigencia de conducta de todos y cada uno de los servidores públicos, la tercera y última incluye una serie de trabajos en los que la Ética aparece como fin de algunas de las actuaciones administrativas en las que con más frecuencia se contraviene, como El matrimonio entre personas del mismo sexo; El derecho a contraer matrimonio en la jurisprudencia del Tribunal europeo de derechos humanos y La protección de la salud sexual, en la que se estudian algunas de las cuestiones que plantea la LO 2/2011 de 3 de marzo llamada de «salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo».