La cultura es fuente, a veces beligerante, de identidad colectiva, y archivo de lo que cada sociedad ha vivido o imaginado, una fuente y un archivo en que los escritores tienen el poder de nombrar y de contar. En el caso de la cultura catalana, autores como Jacint Verdaguer, Joan Maragall, Salvador Espriu o Miquel Martí i Pol (considerados por muchos " poetas nacionales " ) han escrito y cedido palabras que luego han sido esenciales a la hora de establecer, mantener y reproducir la idea de comunidad. A cambio, han obtenido un importante reconocimiento público. Este es o quiere ser un libro de historia cultural. Y un libro, como reza su subtítulo, sobre escritores, literatura e identidad: el último siglo y medio puede ser visto como un largo esfuerzo de la cultura catalana por " ser " , y en ese esfuerzo lo literario ha jugado siempre un papel destacado. " Construir con palabras. Escritores, literatura e identidad en Cataluña (1859-2019) " estudia el papel clave de textos, autores, editores, traductores, críticos, organizaciones, instituciones, revistas y certámenes, de todos los agentes del sistema literario, vistos de forma vinculada y dinámica, en la configuración de la cultura catalana contemporánea. Y lo hace siguiendo la máxima de que la tradición no consiste en adorar cenizas, sino en mantener vivo un fuego.