Aunque Daisy consiguió salir corriendo antes de morder a Max, sus problemas amorosos no han hecho más que empezar. Su familia no ve con buenos ojos que su hija sea la novia de un mortal, y Mirko ha decidido unir fuerzas con Marilyn, enamorada de Max, para intenta romper la pareja. ¿Será su amor lo bastante fuerte para soportar el peso de los celos?