Ir al contenidoTratamiento y terapéutica
Esta obra resulta de gran interés en el área de la medicina cardiovascular, ya que en los últimos años se ha producido una reducción espectacular de la morbilidad y mortalidad cardiovascular debido sobre todo a los avances producidos en tres ámbitos: el diagnóstico, el tratamiento y la prevención. Y en el primero de ellos, el diagnóstico cardíaco, el avance se ha debido casi de manera exclusiva a los progresos espectaculares que se han producido en el diagnóstico por imagen. En los últimos cinco años la tecnología para el diagnóstico cardíaco por imagen ha progresado de forma exponencial y las aportaciones de las técnicas de imagen no invasivas o mínimamente invasivas han aumentado con una rapidez inesperada, por lo que se hacía imprescindible una obra completa que recogiera todo el saber actual sobre el diagnóstico clínico cardiovascular por imagen. Cada vez resulta también más importante realizar no ya un diagnóstico sino una evaluación clínica exacta y un avance del pronóstico, para lo que se necesita acudir de manera ineludible a las técnicas de imagen disponibles. Esta obra, complemento del clásico Braunwald Tratado de Cardiología, revisa los principios físicos del diagnóstico cardiovascular por imagen y aporta la información necesaria para utilizar e interpretar toda la gama actual de técnicas de imagen y representa una guía muy útil para la aplicación de esta técnicas, complejas y algunas veces muy caras, a la resolución de una gran variedad de problemas cardiovasculares. Su gran aportación, teniendo en cuenta, además, que suelen ser técnicas caras o muy caras, es que compara la utilidad de las diferentes técnicas de imagen para cada patología cardiovascular tratada y los beneficios que aportan para recomendar la más conveniente desde todos los puntos de vista: clínico y económico (análisis de rentabilidad). La mayoría de los capítulos comienzan con un resumen detallado para facilitar la búsqueda de información sobre los diferentes temas y contienen la información necesaria para realizar una correcta elección de la técnica de imagen más apropiada y rentable para conseguir un diagnóstico exacto y rápido, siguiendo, siempre que ha sido posible, un orden lógico en las decisiones clínicas.