Los primeros cristianos se reunían para comer, y lo hacían siguiendo el modelo del banquete grecorromano habitual en aquella época. Con el correr del tiempo, se produjo el paso del ritual del comedor al altar, y del mundo social al orden eclesial. Así, la eucaristía se trasladó desde las casas privadas a la sala de reuniones y a la basílica. El autor enfoca esta obra de modo que, tomando conciencia de la riqueza de la tradición de las comidas cristianas más antiguas, podamos encontrar hoy en ella modelos de renovación de la teología y de la liturgia cristianas para poner mayor énfasis en la comunidad.
Lo normal hasta ahora ha sido interpretar la Regla de san Agustín desde planteamientos ascético-morales, pero la presente obra muestra que esta no es la única forma posible. Punto de partida es entender, en clave patrística, la espiritualidad como el salir del hombre en actitud de acogida al encuentro del Dios trino que se ha anticipado a encontrarle a él, según la fe propone y la teología expone. En línea con este principio, el escrito agustiniano es interpretado a la luz de sus textos de cuño teológico, pocos y de limitada extensión, pero estratégicamente ubicados. De ahí resulta una espiritualidad cuyo núcleo es teológico y, por tanto, trinitario, que halla expresión en el concepto de comunión con las tres divinas Personas, de la que deriva la comunión con los hombres. El resto de los preceptos de la Regla, de evidente tono ascético-moral, no cabe entenderlos sino como medios al servicio de esa comunión, [sea para hacerla visible, sea para protegerla, sea para intensificarla; medios] resumidos en estos tres principios: vida en común, interioridad y confessio, a los que el autor dedica la debida atención. En consecuencia, la obra no servirá solo para nutrir la espiritualidad de los religiosos y religiosas que profesan la Regla de san Agustín y de quienes viven en su órbita espiritual, sino también la de cualquier laico que aspire a vivir una espiritualidad radicalmente cristiana. La claridad en el planteamiento y en la exposición hará fácil su lectura a unos y a otros.
Dios: una gran palabra. Para algunos, una palabra vacía; para otros, una palabra temida; pero para un tercer grupo, bastante numeroso, fundamento y meta de la esperanza. Sobre este trasfondo, Walter Kasper se pregunta por la posibilidad de la experiencia y del conocimiento de Dios y, al mismo tiempo, reflexiona tanto sobre la ocultación de Dios como sobre el significado de la revelación. ¿Cómo cabe hablar de Dios de manera clara y comprensible? Para Kasper, esto solo es posible a la vista del Dios concreto de la historia, del Dios de Jesucristo, del Dios que, como Espíritu Santo, da vida. Ello le lleva, por último, a desarrollar la doctrina del Dios trinitario, al Dios que en sí mismo es comunión y amor y hace al ser humano partícipe de esa su esencia. «La pregunta por Dios y el mensaje sobre Dios es el punto de partida, el fundamento, el centro y el criterio de toda teología. Jesús vino a anunciar el Evangelio de la llegada del reino de Dios (cf. Mc 1,14s). Eso es lo esencial de su mensaje. Recordó el primer mandamiento del Antiguo Testamento (cf. Ex 20,3; Dt 5,7; 6,4-5), caracterizándolo como el precepto más importante, el que sintetiza todos los demás: amar a Dios con todo el corazón, con toda el alma, con toda la mente y con todas las fuerzas, pero también amar al prójimo como a uno mismo (cf. Mc 12,29-31). »El presente libro, que ahora se publica en una nueva edición española, desea recordar este mensaje central. Quiere afirmar que la Iglesia no se anuncia a sí misma. No es la Iglesia la que ocupa el centro, sino Dios y, con él, el hermano y la hermana que pasan necesidad y precisan de nuestra ayuda» (Cardenal Walter Kasper, «Introducción a la nueva edición española»). WALTER KASPER, nacido en 1933, doctor en teología y profesor de Dogmática, fue obispo de la diócesis de Rottemburgo-Stuttgart desde 1989 hasta 1999. Presidente emérito del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos, fue elevado a cardenal en 2001. Con sus numerosos escritos, charlas y conferencias se ha hecho merecedor de un respeto generalizado a lo largo y ancho del mundo ecuménico. Entre los libros de Walter Kasper que han visto la luz en la Editorial Sal Terrae destacamos: Sacramento de la unidad. Eucaristía e Iglesia / Cosechar los frutos. Aspectos básicos de la fe cristiana en el diálogo ecuménico / La misericordia / El Evangelio de Jesucristo / Jesús el Cristo / La Iglesia de Jesucristo. GEORGE AUGUSTIN (ed.), catedrático de teología dogmática y fundamental, es director del Instituto de Teología, Ecumenismo y Espiritualidad «Cardenal Walter Kasper».
Me han llegado noticias -dice José Antonio Pagola- de diferentes grupos que se han reunido para leer juntos mi libro "Jesús. Aproximación histórica" compartiendo sus experiencias. Comunidades eclesiales de base de países latinoamericanos, grupos constituidos en parroquias, amigos que has organizado una especie de círculo de lectores, grupos de matrimonios cristianos, alguna sociedad popular que se ha reunido periódicamente para cenar y comentar en la sobremesa la lectura de cada capítulo... Esta "Guía de lectura" ayudará a muchos lectores no solo a profundizar en las páginas de mi libro, sino, sobre todo, a conocer más a Jesús, a sintonizar mejor con su mensaje y a colaborar con más entusiasmo en el proyecto del reino de Dios. Quien utilice esta guía encontrará toda clase de recursos, pautas y orientaciones para comprender mejor el contenido y el significado de mi obra.
La fe proporciona un impulso a la alegría interior, que a su vez brinda fuerza y renovación. Es una alegría profunda y cálida en el corazón que es capaz de acompañarnos y sostenernos a través de todas las dificultades de la vida. Según Eduard Lohse, la alegría es el leit-motiv fundamental del Nuevo Testamento. El autor se pregunta por el fundamento, el contenido y la transmisión de la alegría en las comunidades paleocristianas, poniendo nuevamente de relieve los diferentes timbres de la alegría mediante los textos evangélicos y las cartas paulinas y haciendo ver hábilmente y con toda claridad la interconexión entre el Antiguo y el Nuevo Testamento. A lo largo de la Biblia se extiende, como un hilo conductor, el motivo de la alegría. EDUARD LOHSE, doctor en Teología, fue profesor invitado en la Universidad Gregoriana de Roma y es profesor emérito de la Universidad de Göttingen.
Provocador, persuasivo y de intachable erudición, este libro pionero del renombrado teólogo y bioquímico Arthur Peacocke logra reconciliar los enfrentados mundos de la ciencia y la religión. Aplicando las reglas del pensamiento científico a cuestiones teológicas, Peacocke sostiene que el principio divino opera detrás de todos los aspectos de la existencia, ya sean espirituales o físicos. En esta obra de rigurosa argumentación y notable amenidad, que podría señalar «el final de nuestra exploración», se abordan frontalmente, al hilo de un cuidadoso estudio, problemas tan fundamentales como la componibilidad de evolución y creación o la relación existente entre Newton, la causalidad y la acción divina. Abogando por una nueva y optimista teología para el mundo feliz en que vivimos (our brave new world: referencia a la famosa y casi homónima novela de Aldous Huxley), Arthur Peacocke abre perspectivas inéditas en lo que atañe a la búsqueda de la ciencia, pero también a la de la teología; y lo hace de una manera que incitará a los lectores a reexaminar su propia interioridad, así como el mundo que los rodea e incluso lo que hay más allá. ARTHUR PEACOCKE (1924-2006) publicó más de doscientos artículos y doce libros (más una obra póstuma, editada por Philip Clayton: All That Is A Naturalistic Faith for the Twenty-First Century), entre los que destaca el éxito de ventas Theology for a Scientific Age, galardonado por la Templeton Foundation en 1995. Esta misma institución le concedió en 2001 el prestigioso Templeton Prize for Progress in Religion por el conjunto de su obra. Tras veinticinco años de dedicación profesional al campo de la bioquímica, Peacocke, ordenado sacerdote de la Iglesia de Inglaterra, comenzó en 1973 a enseñar teología en el Clare College de Cambrigde. En 1985 se trasladó a la Universidad de Oxford, donde dirigió en diversos periodos el Ian Ramsey Center for the Study of Science and Theology.
«Creer significa admitir algo como verdadero. Creemos cuando damos nuestro asentimiento definitiva e incuestionablemente. Una opinión no es una creencia. La fe implica certeza».
Tras varios años de tener agotado este título lo reeditamos ahora. Nueve escenas. Nueve capítulos. Este libro contiene la predicación de una Novena de la Inmaculada con asistencia de más de dos mil de personas. Libro bien escrito, sencillo, orientado
La edición de «Opúsculos y cuestiones selectas» de santo Tomás de Aquino se propone dar a conocer un sector importante de sus escritos, donde su genio filosófico y teológico alcanza sus mayores cotas. Con frecuencia, sus estudiosos, cautivados por la perfecta sistematización y transparencia de la «Suma de Teología», no han reparado en que algunos de sus temas fueron precedidos, simultaneados o continuados en escritos monográficos o en disputas académicas, donde las cuestiones más controvertidas y profundas obtenían su adecuado tratamiento. La Biblioteca de Autores Cristiano, que precedentemente ha difundido la «Suma de Teología» y la «Suma contra gentiles» entre los lectores de habla hispana, inicia ahora la publicación de opúsculos y cuestiones de Santo Tomás, casi desconocidos incluso para investigadores del pensamiento medieval, pero imprescindibles para conocer ínte-gramente su pensamiento. La edición bilingüe incorpora por primera vez el texto de la edición leonina de las obras de Santo Tomás, su traducción y edición ha sido encomendada a profesores especializados en las respectivas materias.
«Tachar a Dios, de hecho, indica y recuerda que Dios tacha nuestro pensamiento porque lo satura; o mejor, que sólo entra en nuestro pensamiento obligándolo a criticarse él mismo». Jean-Luc Marion nos permite comprender en este libro la necesidad de esa tachadura que instaura, después de la «muerte de Dios» enunciada por Nietzsche y de la posición heideggeriana al respecto, una nueva perspectiva de la relación entre filosofía y teología. En esta dirección, Marion empieza estableciendo una distinción visual y conceptual entre ídolo e icono para desarrollar, progresivamente, una de las tesis principales de este libro, anunciada por el título mismo: Dios sin el ser, es decir, la posibilidad y necesidad de acceder a Dios desde una perspectiva otra que la del ser. Sin lugar a dudas, la lectura de Dios sin el ser es fundamental para comprender cómo y desde dónde pensamos hoy en día las cuestiones más esenciales para la filosofía: el ser, el don, Dios, sus diferentes manifestaciones y su lenguaje. Recientemente, se han publicado en español varios libros de Marion: El cruce de lo visible (Ellago Ediciones, 2006); Siendo dado. Ensayo para una fenomenología de la donación (Ed. Síntesis, 2008); y Sobre la ontología gris de Descartes (Escolar y Mayo eds., 2008).
Sentimos impotencia, se nos encoge el corazón, se nos hace un nudo en la garganta y perdemos la paciencia cuando un ser querido padece alzhéimer o es objeto de nuestros cuidados profesionales. Quizá pensamos que deberían habernos dado un manual para la situación, por lo complicada que nos resulta personal y relacionalmente. A veces reaccionamos de manera espontánea: «Se acuerda de lo que quiere»; o bien nos cansamos de estimular a la persona en el nivel cognitivo y afectivo... o nos entregamos en exceso a su cuidado. Cuando aparecen los primeros síntomas de la enfermedad, no sabemos si decírselo; nosotros mismos nos negamos y resistimos a aceptar que es una enfermedad y no un mero despiste o una manía... Estas y otras situaciones generan en las familias problemas muy concretos que necesitan ser iluminados y acompañados. Sueño con ver este libro en manos de familiares de enfermos de alzhéimer, así como en manos de cuidadores. Deseo que sientan que estas páginas reflejan un poco de comprensión ante lo que están viviendo. Confío en que sean útiles para responder a inquietudes y necesidades de estrategias, para vivir sanamente los límites que nos impone la naturaleza humana y para humanizar la atención a las personas con alzhéimer. JOSÉ CARLOS BERMEJO es religioso camilo, doctor en teología pastoral sanitaria, máster en bioética y counselling, temas sobre los que ha escrito numerosos libros. Es además director del Centro San Camilo (Centro Asistencial y Centro de Humanización de la Salud) en Tres Cantos (Madrid) y profesor en varias universidades de España, Italia, Portugal y Chile.
Es una gran satisfacción el poder introducir con estas breves líneas la conferencia que magistralmente impartió Don César Franco, nuestro querido Consiliario Nacional de la Asociación Católica de Propagandistas y Obispo Auxiliar de Madrid, en el Colegio CEU San Pablo de Claudio Coello. Esta conferencia se suma a muchas otras iniciativas que desde la Fundación Universitaria San Pablo CEU se han venido realizando con motivo del bimilenario del nacimiento de San Pablo, conmemoración a la que Benedicto XVI nos animó a sumarnos y participar, haciendo de ello un momento privilegiado de encuentro con la figura del Apóstol de las gentes y a través de él con el mismo Cristo Resucitado. Cumple la conferencia de D. César magníficamente con este doble propósito, con un estilo claro y sencillo, propio del que se dirige a jóvenes y adolescentes, pero cargado de la profundidad dogmática y de la riqueza del que se ha consagrado al estudio de las Sagradas Escrituras, nos introduce en la figura de San Pablo, desgrana los principales hitos de la teología paulina y nos da la oportunidad de aumentar nuestro amor a Jesucristo a través de un mayor y mejor conocimiento de su Apóstol.
Joseph Ratzinger es uno de los grandes teólogos de nuestra época. La profundidad y riqueza de su pensamiento es notable, así como su extensión, pues escribe al hilo del tiempo y de la historia, conjugando la riqueza de la tradición con las necesidades de los tiempos presentes.