El volumen agrupa las actas del XLV Simposio de Teología Trinitaria (Salamanca, 21-22 de octubre de 2011). Este simposio está en estrecha relación con el anterior (Dios-Trinidad y ateísmo, 2009), pues a Dios no llegamos ordinariamente debatiendo sobre las pruebas de su existencia, sino abriéndonos a la comunión con él principalmente a través de la oración. El libro se abre con una reflexión del P. Frédéric Manns, en la que trata de la preparación a la Trinidad en los libros sapienciales y en el judaísmo. A continuación, el profesor Dr. D. Santiago Guijarro Oporto en una breve nota reflexiona sobre una problemática en cierto sentido nueva: el surgimiento de la fe trinitaria en un contexto marcadamente monoteísta. La fuente patrística de la oración cristiana-trinitaria la exponen los profesores Dr. D. Marcelo Merino Rodríguez y el P. Pío de Luis; el primero desde la perspectiva oriental, de la mano de San Gregorio de Nacianzo, y el segundo, de la mano de San Agustín. La fuente que procede de los maestros de la espiritualidad nos la descubrirá la profesora Dra. Claire Marie Stubbemann, a través de dos místicas alemanas, Santa Gertrudis de Helfta y Santa Teresa Benedicta de la Cruz, Edith Stein. En la fuente litúrgica de la oración, centrada en la liturgia hispánica, nos introduce el profesor Dr. D. Jaime Sancho Andreu. Finalmente, el simposio se cierra con una reflexión de carácter sistemático sobre la oración cristiana como oración trinitaria, poniendo especialmente de relieve la obra del Espíritu, a cargo del profesor Dr. D. Santiago Arzubialde.
Guardini pronosticó que el siglo XX sería el de la Iglesia, y también lo es el siglo XXI. La renovación, puesta al día y reforma de la Iglesia que pretendían las corrientes renovadoras del siglo XX, y a la que apuntó el Concilio Vaticano II, sigue siendo una tarea incompleta e irrealizada. Muchos problemas que afectan hoy al catolicismo son eclesiológicos. No basta con una renovación espiritual, sino que es necesario un cambio institucional, para responder a los nuevos retos de la secularización, la laicidad del Estado y la sociedad, y el proceso vigente de globalización. Estas diez palabras (comunión, democracia, Iglesia, laicos, ministerios, misión, pobres, pueblo, sacramento, sinodalidad) se centran en temas eclesiológicos claves, en puntos de incidencia con vistas a la identidad y actualización católica. No pretenden ofrecer un tratado sistemático sobre la Iglesia, sino abrir perspectivas en cuestiones vitales. El conjunto de autores y de temas de este volumen permite captar algunas de las problemáticas que afectan hoy a la crisis del catolicismo en las modernas sociedades del Primer y Tercer Mundo.
El beato Juan Duns Escoto (1266-1308) es uno de los maestros más sobresalientes en filosofía y teología medievales. Su figura y su pensamiento están adquiriendo gran relevancia actualmente tanto en filosofía como en teología. Pablo VI y Juan Pablo II lo definieron como «el cantor del Verbo encarnado y del Primado de Cristo», «el defensor y adalid de la Inmaculada Concepción de María». Al cumplirse este año el séptimo centenario de la muerte del llamado Doctor Sutil y Doctor Mariano, la BAC publica su pensamiento original sobre Jesucristo y María, con textos tomados de la obra crítica de la Comisión Internacional de Roma (edición vaticana). Esta obra de Escoto, genial y profunda, en la que se ensamblan maravillosamente la persona de Jesucristo y la vinculación de María en la historia de la salvación, es ciertamente una gran aportación y un buen servicio al lector de lengua española, pues se trata de un maestro clásico y original en cristología y mariología.
Ésta es una herramienta para conocer quién es Jesucristo, para descubrir su actualidad y su significación presente. Para que no resulte un personaje abstracto o lejano. Para encontrarse con él desde las circunstancias y contextos personales.
Este libro ofrece muchas y variadas propuestas personales o grupales para conocer al Espíritu Santo. Sirve para un rato de plegaria, para un tiempo de trabajo y reflexión, para un día de retiro, para unas jornadas del Espíritu o una intensa Vigilia.
Durante siglos ha sido posible rastrear el ser de Dios siguiendo la historia de Jesús de Nazaret. Sin embargo, al estar nuestra época dominada por la «muerte de Dios» y el «fin de la religión», se ha vuelto problemático el pensamiento sobre Dios e incluso sobre el propio hombre. Joseph Moingt ha dedicado a esta cuestión las páginas que componen la presente obra. En ella estudia, en primer lugar, la evolución sufrida por el tema de Dios en la filosofía que va desde Descartes hasta nuestros días, exponiendo los caminos por los que se ha extendido la increencia y observando las reacciones de la teología y sus nuevos intentos de reconciliación entre la fe y la razón (Primera parte: «El duelo por Dios»). A continuación, se adentra en los evangelios como lugar privilegiado de la cristología. Sin embargo, su investigación constata que la tradición cristiana ha transmitido una noción general de Dios refutada por la modernidad. Para superar dicha objeción busca identificar los signos de la presencia de Dios que se revelan y ocultan simultáneamente en Jesús de Nazaret. Más aún, en el acontecimiento de la cruz de Jesús, la fe percibe y reconoce el advenimiento trinitario del Dios-amor que es- para-nosotros (Segunda parte: «Desvelamiento de Dios en el cuerpo de Cristo»).
?Sus casi mil páginas son el resultado de treinta años de magisterio en la facultad de teología de Salamanca y en la Iglesia universal. Son páginas de teología orante y experiencial, desde la entraña del cristianismo, páginas que me atrevo a presentar en perspectiva de mística. No se han escrito en estos diez últimos años páginas mejores, en esta línea? (X. Pikaza).
Hans Küng invita en este libro a personalidades de fama internacional a debatir sobre las posibilidades para una ética mundial desde su particular punto de vista, a partir de su situación personal y desde su perspectiva regional, cultural y religiosa. La necesidad de una ética para todos los seres humanos, independientemente de su religión, ideología o nación, ha sido ampliamente respaldada desde que, en 1990, presentara su obra Proyecto de una ética mundial (Trotta, 5.ed. 2002), traducida a numerosos idiomas. Su proyecto consiste, ni más ni menos, en alcanzar un consenso fundamental a partir de valores comunes, opiniones y normas reconocibles por todos los seres humanos en el seno de sus propias tradiciones, como el compromiso con una cultura de la no-violencia, la solidaridad, la tolerancia y la amistad entre el hombre y la mujer.
En la Escritura se encuentran entrelazadas la profecía y la sabiduría. Mientras que algunos textos presentan el misterio de la fe en términos de elección y alianza, releyendo los acontecimientos a la luz de la Palabra, otros escrutan el orden de las cosas, describen un arte de vivir inspirado en la fe y remontan finalmente hasta la sabiduría eterna para comprender la realidad. Estas dos perspectivas también se hallan presentes en la historia de la teología cristiana. De hecho, la fuerza profética de la palabra de la fe ha retrocedido en ocasiones ante el ardor contemplativo de la sabiduría. Agustín, Tomás de Aquino y Dionisio se revelan aquí como auténticos maestros. Pero en una época en que el espacio-tiempo se manifiesta de manera renovada, y tanto el cosmos como las civilizaciones están marcados por rupturas, transformaciones y evoluciones, la cuestión de un sentido se impone. Resuena entonces una llamada a vivificar la inspiración profética de la teología, buscando comprender, con la fe y la inteligencia, el significado de la historia.
Este libro analiza la figura de María virgen, madre, esposa, mujer, desde los relatos evangélicos y desde las diferentes interpretaciones que ha tenido su figura a lo largo de la historia y de la teología, para proponerla, finalmente, como un modelo para la Iglesia y para los cristianos de hoy. María, cuya existencia se resume en un Sí perenne a Jesucristo, es vista como una ayuda para la Iglesia a actuar como Jesús, con claridad y sin autoritarismos, para servir a todos y sobre todo a los más pobres, olvidándose de sí.
Esta obra reúne los principales documentos doctrinales del Magisterio de la Iglesia. Tales documentos se presentan agrupados sistemáticamente, de modo que el lector pueda encontrar con facilidad cuanto el Magisterio eclesiástico ha enseñado sobre cada materia. Por otra parte, la sistematización de ese acervo documental convierte al conjunto del libro en una especie de manual de síntesis teológica, elaborado con textos magisteriales, que ofrece una visión de conjunto de la dogmática, accesible a un estudio directo de la obra. Todos los documentos se presentan tanto en su texto original como en una cuidada traducción castellana.
No es fácil a la cultura moderna la aceptación del dogma de la Inmaculada Concepción. Su formula definitoria se apoya en la teología tradicional del pecado, contestada hoy dentro y fuera de la Iglesia católica. El mayor conocimiento de la Escritura plantea actualmente serios interrogantes a la interpretación tradicional de los textos bíblicos, que se aducen como fundamentación de este dogma. Se repi-te por doquier que la Inmaculada Concepción no está en la Escritura y que, por lo tanto, hay que rechazarla. Es cierto, por otro lado, que la Tradición no habla explícitamente de ella y que los grandes teólogos, siguiendo a los San-tos Padres afirmaban que María había contraído el pecado original como los demás hombres. Si el Papa no está por encima de la palabra revelada, sino a su servicio, ¿cómo se pudo llegar a la definición de este dogma? ¿Ha sido legítima? Éste es el tema actual que intenta analizar el presente libro.