Este libro permite a los seglares y también a religiosos y a sacerdotes un fácil acceso al misterio de la Trinidad, el misterio cristiano por excelencia y quizá el más impenetrable de todos. Tras hacer un breve repaso de la visión que se da de la Trinidad en las Escrituras, en la Tradición y en la Teología, el autor se apoya en la Encarnación y en los conceptos de persona y naturaleza para ofrecer una comprensión más clara y pedagógica de este misterio. Se centra después en el Espíritu Santo, que no es solo la consecuencia del amor del Padre y del Hijo, sino que tiene también un papel activo en el seno de la Trinidad. Por último, analiza el concepto de la gracia, que considera unido al de la Trinidad, ya que no es algo que Dios da, sino Dios mismo que se nos da, presencia de Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo en el hombre.
Bruno Forte, actual arzobispo de Chieti-Vasto, una antigua diócesis del centro-sur de Italia, es una de las personas que más ha profundizado en nuestro tiempo en la relación entre fe e historia. Es un hombre de Iglesia que todavía no ha renunciado a poner en diálogo teología y filosofía, religión y estética, pensamiento y vida, y ello porque cree en la posibilidad de hablar sobre Dios de muchos modos. Cree también que, para posibilitar tal diálogo, conviene colmar la falta de nostalgia por la ausencia de Dios típica de la modernidad. En su opinión, este es el tiempo de la caída de las ideologías y de la razón totalizadora, pero también es el tiempo del triunfo de la identidad y de los miedos frente a la utopía. En cuanto teólogo y filósofo, pero también en cuanto pastor y punto de referencia para la Iglesia y para la sociedad europeas -también en el ecumenismo y con el pensamiento laico-, Bruno Forte ha recorrido estos senderos. A ellos invita a entrar a los creyentes de hoy.
Los profetas hablan de los pobres y la connivencia entre la Iglesia y los ricos, los poderosos. Al principio, la Iglesia se hacía con y para los pobres, pero con las ciudades empezaron las divisiones de clase. La desigualdad produjo movimientos sociales liderados por los pobres que protestaban contra la opresión social y contra la riqueza de la jerarquía y del clero, y a partir de ahí surgieron diversos profetas. Hoy en día, sin embargo, la profecía en la Iglesia ha sufrido cambios. En ese sentido, la preocupación del autor es la misma que la de Hélder Cámara: ¿qué ocurre hoy con la profecía? ¿Es la Iglesia actual la Iglesia de los pobres o está contaminada de tal modo por la ideología oficial y por el sistema dominante que no se atreve a hablar o ni siquiera se da cuenta de que podría hacerlo?
Al fin ve la luz en castellano la obra más importante de Friedrich Schleiermacher, Compendio de la fe cristiana expuesta según los principios de la Iglesia evangélica. La traducción corresponde a la segunda edición, revisada y definitiva, publicada en dos volúmenes en 1830 y 1831. Convertido en un clásico casi desde el mismo momento de su aparición, ocupa un lugar fundamental entre las obras de teología que intentan presentar la fe cristiana en su integridad. Su publicación inauguró un periodo creativo y renovador en el pensamiento cristiano, en el que se sentía la urgencia de repensar la tradición teológica en el mundo moderno. Schleiermacher se mueve con igual soltura entre los sistemas teológicos de la ortodoxia protestante, la filosofía alemana de la época y el nuevo imaginario creado por las ciencias históricas y naturales. La fe cristiana aborda los temas de la dogmática cristiana de forma original. Su novedoso método, calificado por el autor como «ortodoxia en movimiento», se enraíza en el pasado, si bien trata de proponer a la vez nuevas formulaciones que sean inteligibles para cualquier tiempo. A pesar de ser una obra polémica y controvertida desde su publicación, no ha dejado de sentirse su influencia desde entonces, de tal modo que ha llegado a ser comparada con la Summa Theologica de Santo Tomás, o con las Instituciones de Calvino.
La actual crisis que padecemos no es solo una crisis económico-financiera. Es una crisis de la humanidad. El sistema que dirige en estos momentos la marcha del mundo es objetivamente inhumano: conduce a una minoría de poderosos a un bienestar insensato y deshumanizador. La razón ha quedado secuestrada: no se pregunta por los fines, no se habla del sentido que tiene la historia de la humanidad ni de cuál es el lugar del ser humano en la Tierra. Jesús irrumpe en la historia como una llamada a vivir de manera alternativa experimentando a Dios como una Fuerza que nos está atrayendo hacia un mundo más humano y dichoso. Su mensaje no proviene del interior del sistema imperial ni de la institución del Templo. Venía a decir: «El tiempo se ha cumplido. El reino de Dios está cerca. Convertíos y creed en esta Buena Noticia». Empieza un tiempo nuevo. Dios no quiere dejarnos solos ante nuestros conflictos, sufrimientos y desafíos. Quiere construir, con nosotros y junto a nosotros, una vida más humana.
Nueva edición de Aquí y ahora, el libro que Henri Nouwen, uno de los escritores de espiritualidad más influyentes del siglo XX, escribió dos años antes de su muerte. Se trata de una serie de meditaciones sobre la vida que siguen teniendo plena vigencia y que resumen, de algún modo, su espiritualidad. Él mismo las definió como «un largo examen de conciencia», «una amplia profesión de fe personal», «una visión coherente de la vida espiritual», una invitación a cada cual a «descubrir su propio itinerario espiritual». Son meditaciones que desarrollan temas como la alegría en medio del sufrimiento, las ventajas e inconvenientes de la amistad y de la familia; los trabajos y recompensas de la oración; el perdón y la compasión; el seguimiento y la disciplina, y el proceso de la conversión, que dura toda la vida.
Gustavo Gutiérrez, teólogo peruano es desde 1999 miembro de la Orden de Predicadores. Es considerado uno de los fundadores de la teología de la liberación. Esta corriente teológica quiere pensar responsablemente las consecuencias sociales de la fe cristiana en la sociedad lationamericana. A pesar de la proximidad cultural en la bibliografía teológica española apenas hay estudios dedicados a analizar su obra. Esta obra de Juan Pablo García Maestro viene a aliviar esta carencia. En una primera parte presenta la biografía y evolución de la teología de Gustavo Gutiérrez. Posteriormente se analizan las influencias recibidas y se presenta el núcleo de su pensamiento teológico.
El cielo, la vida eterna, siendo una realidad de tanta importancia, le dedicamos poca atención. A nuestra poca atención se une una gran falta de fe. He aquí una aproximación sencilla y piadosa del cielo, nuestro destino eterno, y donde se colmarán todas las ansias de felicidad.
El amor ocupa el centro de la fe cristiana. Dios ama este universo en el que el amor humano, como don de Dios, es capaz de transformar la vida. El amor de Dios y el amor humano son de vital importancia para la reflexión teológica. Sin embargo, algunos pensadores cristianos han desarrollado a menudo enfoques radicalmente diferentes de la relación entre el amor divino y el amor humano y de la importancia para este último del cuerpo, el deseo, el género y la sexualidad. Es más, mientras la reflexión sobre el amor condujo a algunos cristianos a esperar el restablecimiento del paraíso perdido a consecuencia del pecado original, otros esperan alcanzar la plenitud de vida gracias al poder transformador del amor, de acuerdo con el proyecto creador y reconciliador de Dios. En esta magistral crónica del itinerario del amor en la teología cristiana, Werner G. Jeanrond combina un enriquecedor análisis histórico con una hermenéutica de la sospecha para proponer una nueva y renovadora teología del amor que no elude la encarnación humana ni el deseo. El análisis de algunas teologías bíblicas y postbíblicas del amor y de sus respectivas prioridades, motivaciones y dificultades nos proporciona un contexto que puede ayudarnos a desarrollar una teología crítica y autocrítica del amor en nuestros días. WERNER G. JEANROND, doctor en teología por la Universidad de Chicago (bajo la dirección de David Tracy y Paul Ricoeur), fue el primer laico que ocupó la cátedra de Teología de la Universidad de Glasgow (Reino Unido). Anteriormente había enseñado teología sistemática en el Trinity College de Dublín (Irlanda) y en la Universidad de Lund (Suecia). Actualmente es Master del St. Benets Hall y profesor de teología en la Universidad de Oxford. Sus libros y artículos de teología y hermenéutica han sido traducidos a numerosos idiomas.
La acción más importante que vive un cristiano es asistir a la Santa Misa y recibir la Comunión. Para valorar este hecho, comulgar con más fruto y huir del acostumbramiento, están escritas estas páginas.
La justicia es un tema teológico para la fe cristiana. «Justicia» es uno de los nombres de Yahvé (Jr 23,6) y Jesucristo es para los cristianos «Justicia de Dios» (1 Cor 1,30). Sin embargo, el cristianismo vivido ha dejado de lado o llegado demasiado tarde a la cuestión de la justicia En continuidad con el trabajo de reflexión realizado durante más de treinta años por el Centre d?Estudis «Cristianisme i Justícia» de los jesuitas de Cataluña para hacer visible el vínculo indisoluble entre la fe cristiana y la lucha por la justicia, este libro pretende sistematizar y sintetizar ese trabajo coral de reflexión para avanzar hacia un mundo más humano y más justo y una Iglesia más al servicio de los pobres. Para ello analiza con rigor, denuncia desde el compromiso y propone alternativas, con el fin de contribuir a la transformación de aquellas realidades generadoras de injusticias en nuestro mundo. De lo que se trata, en definitiva, es de mostrar cómo debería configurar la Iglesia su vocación de sacramento de fraternidad universal en un mundo injusto y ofrecer una serie de reflexiones sobre una espiritualidad capaz de configurar un cristianismo de rostro mesiánico y liberador en el siglo XXI. El libro es el resultado modesto, pero convencido, de un teologar indignado «por los llantos inaudibles de los que nada esperan ya de nadie...» (J. Gil de Biedma) y arrodillado ante la presencia en esos despojos del «peso inmenso de la gloria eterna» de Dios (cf. 2 Cor 4,16). F. Javier Vitoria Cormenzana (Bilbao, 1941), presbítero de la diócesis de Bilbao, es Profesor jubilado de la Facultad de Teología de la Universidad de Deusto; Miembro de «Cristianismo y Justicia» y del Consejo de Dirección de «Iglesia Viva»; presidente de la Fundación EDE; miembro del Comité nacional de ética de FIARE y del Equipo pastoral de Artxandape (Bilbao). Ha publicado numerosos libros, entre ellos: ¿Todavía la salvación cristiana? Los diseños soteriológicos de cuatro cristologías actuales / La presencia pública de los cristianos en la sociedad / Religión, Dios, Iglesia en la sociedad española / Un orden económico justo / Cristianismo beligerante con la injusticia. Manifiesto a los 20 años de Cristianisme i Justícia / Jesús de Nazaret: he ahí el hombre / El Dios cristiano. Un Dios misericordioso a disposición incondicional de la humanidad / Vientos de cambio. La Iglesia ante los signos de los tiempos...
En este extraordinario libro el polémico teólogo Hans Küng narra la historia de la Iglesia católica desde sus orígenes en Palestina y Roma a partir de la figura de Jesucristo. Hans Küng pasa revista al origen de las instituciones de la Iglesia, a los grandes cismas -entre oriente y occidente, entre catolicismo y protestantismo-, a la evolución del papel del Papa, a los grandes papas reformadores ya la expansión de una Iglesia global. El prestigioso teólogo explora la evolución histórica de concilios, obispos y cardenales, el entusiasmo misionero de la Iglesia, los orígenes del culto mariano y cómo las convulsiones de la Reforma y la Contrarreforma se pueden aún apreciar en la Iglesia católica de hoy día. El libro concluye con una valoración profunda de cómo la Iglesia católica puede afrontar los inmensos retos que le esperan en el nuevo milenio y que provienen de la ciencia, de las reivindicaciones y conquistas de los movimientos feministas, de quienes buscan una reforma a partir de las Escrituras y de la evolución de la moral sexual. La Iglesia católica es un libro breve pero fundamentado y controvertido, escrito por un pensador universal de profunda influencia.
A lo largo de su historia, las Iglesias cristianas se han encontrado con todo tipo de situaciones sociales, económicas y políticas, tales como la desigualdad social, la violencia, la explotación de pueblos indígenas, la construcción de la democracia o la formulación de los derechos humanos. En ese recorrido histórico, hallamos personalidades y escuelas de notable importancia en la defensa de la dignidad humana, como, por ejemplo, la Escuela de Salamanca, la Escuela de Coímbra, las Reducciones del Paraguay o la Teología de la Liberación. Es sobre todo en el siglo xx cuando sale a la luz un pensamiento social cristiano sistematizado y coherente, a menudo iluminado por documentos de la doctrina social de la Iglesia. Este libro es un curso de introducción al pensamiento social cristiano, impartido por el autor en Berkeley, California, a líderes de comunidades hispanas católicas del Oeste de los Estados Unidos. En él se abordan cinco temas importantes: la construcción personalista de lo social, la antropología cristiana como fundamento primero de los derechos humanos, el destino universal de los bienes como marco del derecho de propiedad, el paso de la antinomia capitalismo/socialismo a la economía social de mercado, y el camino de la violencia estructural a la paz justa a través de la reconciliación política.
Estamos ante una especie de vademécum para el diálogo entre creyentes y no creyentes. Lejos de la frialdad del estudio académico, estas páginas rezuman una experiencia vivida, el resultado de innumerables lecturas y del contacto personal con personas que no creen. Esta obra se coloca admirablemente a caballo de dos pontificados. El de Benedicto XVI, quien propuso la idea del Atrio de los Gentiles, un lugar de encuentro entre creyentes y no creyentes. Y el del papa Francisco, que invita a los fieles a salir del recinto cálido de la propia tribu para dirigirse hacia las periferias del mundo, las «periferias existenciales» en donde vive el otro. El Prof. Torralba ha preferido usar otra imagen elocuente: la de la tierra de nadie, la frontera, el confín, donde creyente y no creyente se encuentran en la búsqueda del sentido último de las cosas. Este encuentro entre creyentes y no creyentes acontece cuando se dejan atrás apologéticas feroces y profanaciones devastadoras, cuando se retira el manto gris de la indiferencia y la superficialidad que sepulta el anhelo profundo de búsqueda y, en cambio, se revelan las razones profundas de la esperanza del creyente y la espera del agnóstico.