El tercer libro de TEOLOGÍA POPULAR es, sin duda alguna, el más importante de los tres, porque explica lo que fue (y los resultados que produjo) la vida de Jesús. El relato se centra aquí en lo que fue, y en cómo fue, el final de aquella vida. Como sabemos fue un final trágico, extremadamente trágico. Pero lo que importa es saber por qué Jesús fue odiado, perseguido y ajusticiado de aquella manera. Además, interesa sumamente tener claro si la muerte fue el final o, más bien, el comienzo de una vida nueva y distinta. Y, para terminar, enterarnos de cómo este conjunto de datos, tan importantes y extraordinarios, ha llegado hasta nosotros. Lo que nos lleva, inevitablemente, a tener que hablar del Espíritu y de la Iglesia. Sobre todo, de la Iglesia, de la que tan mal habla tanta gente y a la que, con frecuencia, vemos tan alejada del Evangelio de Jesús. ¿Qué se puede -y se debe- pensar de estas cuestiones tan serias y de las que tantas personas dicen lo primero que se les antoja? A ello, ni más ni menos, se dedica el contenido de este tercer volumen de TEOLOGÍA POPULAR. José María Castillo nació en Puebla de Don Fadrique (Granada), en 1929. Ha sido jesuita durante más de cincuenta años. Doctor en Teología Dogmática (Universidad Gregoriana. Roma). Profesor de Teología Dogmática (Facultad de Teología de Granada). Profesor invitado en diversas Universidades (Gregoriana, de Roma; Comillas, de Madrid; UCA, de El Salvador). Doctor Honoris Causa por la Universidad de Granada. Ha publicado más de treinta libros, siempre escritos desde la preocupación por relacionar el saber teológico con la realidad que vivimos, no solo los creyentes, sino los seres humanos en general.
La transmisión de la fe ha parecido algo tan sencillo como prender una vela con otra, hasta extender la luz por todos los rincones. Existe una preocupación seria desde hace ya décadas por encontrar fórmulas certeras para que se produzca esa comunicación de la fe que deseamos. No son pocas las iniciativas, planes pastorales y programas puestos en funcionamiento para ello desde las instancias oficiales. Muchas de ellas pretenden volver al pasado para recuperar las estrategias que funcionaron entonces, cuando esa transmisión ocurría en los hogares de manera natural. Pero hoy ya no funciona el Jesusitodemivida que nos enseñaron a recitar nuestras abuelas y con el que tantos de nosotros aprendimos a rezar y dimos nuestros primeros pasos, titubeantes pero decididos, por el camino de la fe. En estas páginas se abordan algunos fallos -y se ofrecen algunas propuestas- en la transmisión de la fe en la familia, la escuela y la vida. -
El autor de este libro se atreve a vérselas con dos problemas fundamentales. Se propone esclarecer qué es la libertad y qué realización de ella ha sido ejemplar, capaz de iluminar nuestra necesidad y nuestra dificultad de ser libres. Una generación y una
Maestro de los pueblos considera al apóstol san Pablo como alguien que, además de llevar el Evangelio a muchas naciones y poner en marcha diversas comunidades, reflexiona de manera personal sobre la catequesis común a toda la Iglesia, a fin de conformar una teología específica, diferente, por ejemplo, de la de Juan o de la Carta a los Hebreos. Maestro de los pueblos muestra cómo, a partir de la primera Carta a los Corintios, Pablo asume la catequesis anterior y la enriquece con su propia reflexión. La obra se puede caracterizar como un intento de abarcar y sistematizar en la medida de lo posible todo lo que es teológicamente relevante en las grandes cartas de Pablo (Romanos, las dos a los Corintios, Gálatas), a la luz de la primera a los Tesalonicenses y sin olvidar la aportación de otras cartas indudables de Pablo, como son Filipenses y Filemón. No faltan aquí los temas obligados en toda la teología paulina: el misterio pascual de Cristo, sus títulos de Hijo de Dios y Señor, la justificación, los dones del Espíritu. Pero alcanzan un relieve especial los temas de la revelación de Dios, la vida terrenal de Jesús, la teología de Israel y el ministerio de la Palabra como clave de toda la eclesiología paulina.
Hoy no está de moda hablar de Dios. Será quizá porque son pocos los hombres que hablan con Dios. El cristiano sabe que mal se puede hablar de Dios si no se tiene el valor de callar, de apagar los ruidos que a diario nos aturden. Hablar con Dios, hablar de Dios es, primero y fundamentalmente, callar nosotros y dejar que Dios nos hable, escucharle.De la mano de uno de los teólogos más grandes de nuestro tiempo, H.U. von Balthasar, este libro acerca a la única y verdadera fuente de la oración cristiana: el encuentro personal con Jesús de Nazaret, Palabra definitiva de Dios a los hombres. Éste es también el principio que debe alimentar toda praxis verdaderamente liberadora en la vida del cristiano: en Jesús, Dios se encarnó y se hermanó de una vez para siempre con los hombres.
Cuando parece que se ha dicho todo sobre la misericordia, este libro coral asoma a nuevas perspectivas a través de autores reconocidos con propuestas enriquecedoras. Sitúa la misericordia en el evangelio, en la experiencia humana, en la teología, en el diálogo interreligios, en la confesión y en internet.
Dar de comer al hambriento pasa por algo más que dar un trozo de pan o alimentos. Es el reto de convertirnos nosotros mismos en ese pan que quite el hambre y que, además, abra las posibilidades de una respuesta espiritual a la sed existencial que anida en el corazón de cada persona.
La necesidad de corregir al que yerra va más allá de terciar para enmendar los errores o descuidos técnicos o meramente académicos, pues incluye una dimensión moral que nos impele a ayudar a nuestro prójimo a diferenciar entre el bien y el mal.
La vida consagrada a Dios en el seguimiento de Jesucristo es una don de Dios a su Iglesia. Es una vida consciente para alabanza y gloria de Dios. A través del testimonio de esta vida, la santidad y la belleza de la Iglesia irradian de manera especial.
La fe cristiana tiene como singularidad, origen e historia creer en un Dios que ha hablado a los hombres desde siempre y que ha venido a habitar entre ellos hace ahora dos mil años, encarnado en Jesús de Nazaret, muerto en una cruz y vuelto a llamar por Dios a la vida para conducir a la humanidad a su destino eterno. Sin embargo, esta revelación, recibida de la debilidad y de la locura de la cruz, dice san Pablo, es difícil de creer, y cae de tan alto y viene de tan lejos que parece en vías de desaparecer de la cultura occidental, a la que ha inspirado y regentado durante tanto tiempo. Este libro revisa la tradición que ha difundido esta fe y experimenta si esta todavía es capaz de hacer creer que Dios viene a los hombres desde el futuro de nuestro destino. La tradición cristiana proclama que Jesús es el Hijo eterno de Dios, nacido hombre de la Virgen María para regenerar la humanidad en el Espíritu de Dios y conducirla por la Iglesia a la vida eterna. Ahora bien, la ciencia moderna de los textos bíblicos y evangélicos ha cavado un foso entre lo que se puede conocer con certeza sobre la historia de Jesús y la interpretación que ha hecho de ella el dogma de la Iglesia, dogma que la evolución de los espíritus hace poco creíble a nuestros contemporáneos. De ahí que los teólogos, que pretenden respetar la verdad histórica de los textos y hacerlos inteligibles a nuestro tiempo, se sientan obligados a repensar esta tradición en su totalidad a la luz de una fe crítica. Eso es lo que ambiciona este libro: emprender un proceso de veracidad y de libertad en la búsqueda del sentido de la fe. Con este objeto el autor emprende la tarea de descifrar el misterio que tiende a expresarse bajo el mito de la preexistencia de Cristo, idea que se encuentra en la base de los conceptos de trinidad, encarnación y redención en el dogma: de hecho, se trata de la revelación de la humanidad de Dios, comprendida como el amor por el que Dios entra en comunicación con los hombres para liberarles de su finitud, del repliegue egoísta y mortífero de cada uno sobre sí mismo, algo que les impide llegar a la unidad entre ellos y con el universo. Joseph Moingt nació en Salbris (Francia) en 1915. Enseñó teología en el escolasticado jesuita de Lyon, posteriormente en el Instituto Católico de París y en el Centro Sèvres de la Compañía de Jesús. Ha dirigido la revista Recherches de science religieuse.
150 relatos, a veces poéticos y siempre sabios, que introducen al lector en el misterio de Dios Padre. El título del libro se refiere a la Historia de Salvación, el abrazo de Dios al mundo, que es un abrazo de amor que comienza con la creación, se estrecha en la Alianza con el pueblo de Israel y a través de él con todos los pueblos, y tiene su culmen en la encarnación de su Hijo y en la resurrección. Es es un libro que habla de Dios, de un Dios comprometido con el mundo que Él mismo ha creado, sostiene y quiere llevar a plenitud, y que aproxima al lector a lo más importante: la experiencia de encuentro con ese Dios que, desde el principio, quiere y abraza al ser humano. Con prólogo de Antonio García Redondo, párroco de San Antonio de Palencia.