La Semana Santa de Granada hunde sus raíces en los años posteriores a su conquista e incorporación a la Corona de Castilla. Durante siglos alcanzó gran esplendor, protagonizada al menos por una decena de cofradías penitenciales. Tras una acusada crisis, renace en las primeras décadas del siglo XX, alcanzando en la actualidad la cifra de treinta y dos cofradías. La trayectoria secular de la Semana Santa granadina y la historia de sus cofradías se analizan en esta visión de conjunto.
Catálogo de la exposición celebrada en el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, 21 de diciembre de 2007 al 24 de marzo de 2008. Presenta las imágenes de lo popular "español" en el marco de la cultura visual, como punto de encuentro de múltiples intereses.
Pequeñas y encantadoras, alejadas de los espectáculos multitudinarios, las fiestas que se presentan en este libro han sobrevivido al paso del tiempo y constituyen buenas muestras del sentir de una colectividad. La guía describe 113 fiestas populares, ordenadas por ciclos anuales y por localidades, con toda la información necesaria para conocer las poblaciones en las que tienen lugar, así como sus modos de vida y tradiciones. Compartir:
Este libro contiene una abundante información sobre las escuelas sociológicas de nuestros días, pero es en sí mismo un trabajo sociológico. Pierre Ansart participa como notable investigador en los movimientos de ideas que expone y se sitúa en una de las corrientes en cuya explicación crítica se empeña. Una primera circularidad que ofrece la rica y significativa construcción de esta obra. Desde el final de la Primera Guerra Mundial, las ciencias sociales se han visto recorridas por corrientes teóricas que se oponen con vigor; en tales condiciones, el observador distraído cree contemplar una sucesión de modas intelectuales. Pareció que se iban imponiendo la fenomenología, el marxismo, el estructuralismo, el dinamismo, la etnometodología... Pero a través de tales divergencias se manifiestan oposiciones profundas que no sólo interesan a personas o instituciones rivales, sino que también corresponden a concepciones divergentes del conocimiento social, a visiones opuestas de la sociedad. Reconstituir esos debates de fondo, esa querella de las epistemologías, con la ambición de esclarecer sus líneas de fuerza y sus fronteras globales, y de dilucidar su significación y sus problemas es lo que Ansart se propone, y logra con éxito.
El análisis del discurso es hoy en día un campo interdisciplinario y muy heterogéneo de las ciencias sociales y las humanidades. La diversidad de los rápidos desarrollos en el campo teórico y metodológico internacional dificulta la identificación de las aportaciones propias de cada disciplina. Por ello, este libro se interesa por teorías y métodos específicamente sociológicos del análisis del discurso. Los estudios sociológicos del discurso son especialmente sensibles a los aspectos de poder y de conocimiento. Otras aportaciones de la sociología de los discursos se refieren a las realidades materiales, las prácticas, los procesos de subjetivación y a la estructura social en su totalidad. El volumen ofrece un diálogo entre perspectivas sociológicamente relevantes de distintas tradiciones internacionales. Reúne por primera vez una gran variedad de visiones expresamente sociológicas del análisis del discurso que se han ido desarrollando en las últimas décadas, sobre todo desde Alemania, Francia y los países anglosajones, sin olvidar las diversas aportaciones de la sociología española. Pone en conversación visiones tan diversas como el cualitativismo crítico español, la Escuela de Frankfurt, la etnografía, la hermenéutica, la sociología del conocimiento, el posestructuralismo, el posfundacionalismo, el pragmatismo o la teoría de prácticas.
Las mujeres moriscas fueron acusadas de practicar la magia. Partiendo de los documentos emanados de la Inquisición, este libro ofrece un análisis muy sugerente sobre este tema valiéndose también de la literatura aljamiada. Es decir, de una literatura clandestina, morisca, transcrita de la literatura musulmana y escrita en castellano con ayuda de caracteres árabes. El título obedece a una simple razón: porque en las prácticas mágicas se invocaban los nombres del diablo, que constituían una verdadera legión