Durante el año dedicado a san Pablo (2008-2009), el papa Benedicto XVI ofreció en las audiencias generales de los miércoles una serie de catequesis dedicadas al apóstol de los gentiles, con la voluntad de animar a los creyentes ?no solo a dedicarle un lugar particular en nuestra veneración, sino también a esforzarnos por comprender lo que nos puede decir también a nosotros, cristianos de hoy?. Porque san Pablo, señalaba el papa, es, sin duda, ?una figura estimulante, que se nos presenta como un ejemplo de entrega total al Señor y a su Iglesia, así como de gran apertura a la humanidad y a sus culturas?. El padre Prudencio López Arróniz nos ofrece esta selección de catequesis sin duda representativas del pensamiento del papa Benedicto, con una introducción que invita a refl exionarlas desde la perspectiva del relativismo tan presente en nuestro mundo, y como una invitación al encuentro con Cristo salvador.
Estas páginas quisieran mostrar una obra maestra de la gracia, a saber, la configuración de una vida humana que, cual blanda arcilla, se deja modelar sin la menor resistencia por las manos divinas. El resultado es la arcilla trocada en pura luz. Teresita no era un ser humano excepcional estuvo llorando durante casi la mitad de su vida. Poseemos en común con ella el barro de nuestro origen y también el soplo divino sobre este barro: la libertad de los hijos de Dios. Este don está totalmente en nuestras manos a fin de que podamos caminar como hijos de la luz (Ef 5.4).
¿Cómo salvar la distancia entre la fe profesada, celebrada y vivida? ¿Cómo proponer lo que afirmamos ser 'plenitud' a quienes se mueven instalados en la relatividad o la indiferencia? ¿Es creíble hoy nuestra 'oferta sacramental'? Y, si no es creíble, ¿cómo hacer para que al menos para aquellos que ocasionalmente participan en nuestras celebraciones les resulte elocuente? ¿Pueden ser nuestros ritos y sacramentos un momento evangelizador que no podemos banalizar? Este cúmulo de interrogantes que el autor recoge en la conclusión de su libro son los que han guiado la reflexión que estas páginas nos proponen, partiendo de la realidad actual del fenómeno religioso, y ofreciendo un conjunto de propuestas que no pretenden ser respuestas definitivas, sino aportaciones a un diálogo sin duda necesario en nuestra Iglesia. Dionisio Borobio (Soria, 1938), es sacerdote de la diócesis de Bilbao, licenciado en filosofía y doctor en Teología. Ha sido profesor de la Universidad de Deusto, y ha dedicado su vida a la docencia de la liturgia y de los sacramentos hasta su jubilación como catedrático de la Universidad Pontificia de Salamanca. Es autor de numerosas publicaciones sobre liturgia y sobre pastoral sacramental y catequética.
La catequesis prebautismal de la arquidiócesis de Zaragoza pretende ayudar a los padres y padrinos en su tarea como educadores en la fe de los niños que van a recibir el bautismo.Para ello analiza, en primer lugar, la tarea de los padres como educadores y, concretamente, educadores en la fe. A continuación, ayuda a comprender el sentido y contenido del sacramento del Bautismo y su incidencia en la vida cristiana de los que lo han recibido. Asimismo desarrolla los símbolos y ritos de la celebración y destaca el papel de la comunidad cristiana dentro de la misma. Finalmente incluye algunas claves dirigidas específicamente a los animadores o catequistas que trabajan en unión con las familias en la preparación del bautismo de sus hijos.
A lo largo de las páginas de este libro, el lector se va a introducir en una de las expe- riencias de evangelización más apasionantes de la historia de la Iglesia: las Reducciones jesuíticas del Paraguay. El Diccionario Larousse de la Lengua Española define las Reducciones como: «Antigua población de indios americanos convertidos al cristianismo y organizados de forma comunitaria por los jesuítas españoles». Las Reducciones fueron una de las mayores hazañas misioneras llevadas a cabo por la Iglesia Católica, sostenidas por misioneros españoles de la Compañía de Jesús, los cuales tuvieron que hacer frente a los riesgos derivados de la enorme amplitud geográfica que abarcaron y a los acontecimientos que se sucedieron a lo largo de su historia. Del triunfo de las mismas, opinó en su día el enciclopedista Voltaire: « la civilización del Paraguay, debida únicamente a los jesuitas españoles, parece ser en cierto modo el triunfo de la Humanidad».
En este cuento, un padre explica a su hija quién es Jesús de Nazaret y su relación con Dios. El padre quiere mostrar a su hija, con en pocas palabras y con tono didáctico, la gran importancia de Jesús para la historia de la humanidad. En el cuento hay una invitación a leer la Biblia y a participar en la Eucaristía, por lo que el libro es recomendable para los niños y las niñas que se preparan para recibir la primera comunión.
Este libro constituye una síntesis de los tres primeros volúmenes dedicados respectivamente al primero, segundo y tercer año de enseñanza de Jesús, según las visiones de Ana Catalina Emmerich, recogidas y ordenadas por el poeta Clemens Brentano. Son una obra extraordinaria que enriquece los evangelios, que a menudo solo nos ofrecen los detalles fundamentales. El lector ve con estupor cómo pasan delante de sus ojos los paisajes de Palestina con los ríos, los lagos, los desiertos y las montañas, los pequeños pueblos, los castillos, las fortificaciones y las ciudades: una geografía que la monja, que no se había movido nunca de su pueblecito de la Alemania septentrional y casi no sabía leer ni escribir, demuestra conocer con precisión; ve cómo se mueven y actúan innumerables personajes con sus costumbres, sus casas, sus vestimentas, sus comidas. Asistimos a las celebraciones del Templo, a matrimonios, viajes, funerales y a muchos otros acontecimientos de la vida cotidiana. Hay, además, en las visiones de la monja una profundización del carácter, de la psicología, de las circunstancias de vida de muchos personajes que fueron testigos y actores de la extraordinaria historia humana y divina de Jesús y que conocemos por los evangelios: el Bautista y su relación con Herodes, Herodías y su hija Salomé; Magdalena, que en la visiones de la monja es la hermana de Lázaro, Marta y María; Dina la Samaritana, a la que Jesús pide de beber; Judas, del que se describen la familia y la vida que llevó hasta el encuentro con Jesús y se explica el porqué de la traición; la familia de los esposos de Caná que tenía amistad con la de Jesús, y muchos otros. El Jesús amable y misericordioso, amado y seguido por la gente sencilla, y el Jesús «incómodo» que es condenado a muerte.
¿Existe un solo dios? ¿Por qué sufre la gente? ¿Qué ocurre tras la muerte? Miles de millones de personas de todo el mundo encuentran sentido en la religión, pero ¿qué ideas respaldan estas creencias, y cómo se han desarrollado? Con un lenguaje claro, El libro de las religiones ofrece concisas explicaciones que desbrozan la jerga académica, esquemas que hacen sencillas las teorías más complejas y una multitud de ingeniosas ilustraciones que juegan con nuestra comprensión de la religión. Tanto el neófito como el estudiante o el experto aficionado hallarán en este libro numerosos contenidos de su interés.
La unidad de las Iglesias es uno de los grandes retos que tenemos pendientes los que creemos en Jesucristo, para que nuestra fe sea creible ante el mundo. Los cristianos, en efecto, llevamos encima un amplio historial de enfrentamientos y divisiones, que configuran hoy un panorama verdaderamente doloroso. Si no queremos vivir de espaldas a esta situacion, es necesario, como un requisito imprescindible, conocer la realidad. Este libro nos ayuda a ello, ofreciendonos una panoramica de las distintas Iglesias y comunidades cristianas, junto con los motivos -a veces seriamente profundos, otras lamentablemente superficiales- que han provocado estas divisiones. Sin duda, un libro necesario para todo creyente interesado en el camino de la Iglesia. Jose Antonio Goñi (Pamplona, 1976) es un joven sacerdote navarro, con amplios conocimientos de teologia, liturgia e historia, miembro del CPL y jefe de redaccion de Phase, que, con una exposicion clara y ordenada, nos presenta esta compleja realidad que tanto se aleja de lo que Jesus pidio en su ultima cena: '!Que todos sean uno!¿.