Gracián es un testigo excepcional del humanismo cristiano. Este trabajo intenta despejar la forma íntima de su pensamiento, que gira en torno al binomio fe y razón, y de su actitud religiosa, que, germinando de la Sagrada Escritura y de los escritos ignacianos, se mantiene como guía de toda la obra. En sintonía con la mística de la Compañía, Gracián, contemplativo en la acción, piensa el enigma del hombre desde la inmensa luz de Dios. Humanista y «Lector de sagrada Escritura», elabora una ética inspirada en la Regla de Oro y en el Mandamiento Nuevo. El hombre, peregrino de la felicidad, sólo puede alcanzarla en el Cielo, el puerto en el que atraca, al fin, su barca. Toda su obra es «una brújula de marear a la excelencia» para llegar así a la isla de la inmortalidad.
La ciencia en el alma reúne cuarenta y dos ensayos, debates y homenajes que abarcan tres décadas, y llega en un momento oportuno y necesario. En una época de fake news y de cuestionamiento de creencias universales, en este apasionado alegato Dawkins insiste en que la razón sea la protagonista de nuestra vida, dejando de lado comportamientos execrables como la xenofobia o la misoginia, que deberían quedar fuera de todo relato. Asimismo recalca la importancia de las pruebas empíricas y critica la mala praxis científica, la presencia de la religión en las escuelas y a los negacionistas del cambio climático. Precisamente ahora, cuando tanta gente cuestiona la realidad de la evolución, Dawkins se pregunta qué pensaría Darwin de su propio legado, y reconoce que la ciencia es poseedora de muchas de las virtudes de la religión ?«explicación, consuelo e inspiración»? sin la pesada carga que aquella conlleva: la superstición y el prejuicio.
Más allá de la concepción material de la ciencia y dejando de lado el sectarismo religioso, se revela una conexión sorprendentemente clara entre la ciencia y la religión. Las reflexiones sobre la trascendencia que nos brindan los santos, los sabios y las personas que han vivido experiencias cercanas a la muerte, cuando nos hablan de milagros, inmortalidad, Dios o conciencia, son totalmente coherentes con las teorías científicas en campos como la relatividad, la medicina, la teoría M, la neurociencia, o la física y la biología cuánticas. La física de Dios, como afirma Amit Goswamit, es una aportación exquisita y valiosa a la literatura sobre la evidencia científica de la existencia de Dios. ¿Podemos afirmar que Dios existe? ¿Es Dios científicamente verificable? ¿Existe una física de Dios? Selbie lo argumenta de forma convincente: a partir del testimonio de místicos de todo el mundo como Santa Teresa o Rumi; dando voz a científicos y pensadores como Albert Einstein, Bohm, Erwin Laszlo o Jung; y apoyándose en descubrimientos como la teoría de cuerdas y otros principios de la física cuántica, la biología o la neurociencia nos demuestra que una física de Dios es posible. La lectura de este libro te ayudará a comprender esta nueva perspectiva. Para disfrutar de ella no necesitas más cualificación que la de verte como algo más que las máquinas sin alma que muchos científicos materialistas ven en el ser humano. Convincente y concisa, la física de Dios demuestra que ciencia y religión, lejos de ser incompatibles, son mutua y profundamente coherentes.
Dado que desde hace años el ateísmo se presenta en algunos ambientes culturales y sociales como un fenómeno casi avasallador, este libro analiza sus razones de ser y sus pretensiones de propaganda. Para comprender la actitud actual de ciertas formas de ateísmo abiertamente agresivas, se afronta este fenómeno desde sus raíces históricas y filosóficas. De este modo se podrá ver si el ateísmo de nuestro tiempo es nuevo y original o es más bien reproducción de formas ya expresadas y vividas pero con ropaje de la época vigente. En este libro se expone no solo el pensamiento esencial de los más destacados teóricos del ateísmo, sino también las afirmaciones teístas de destacados científicos y psicólogos que consideran la existencia de Dios como un hecho que pertenece a la esencia misma del ser humano.
La física cuántica no sólo es el futuro de la ciencia, sino también la clave para comprender la consciencia, Dios, la psicología, la muerte y el significado de la vida, dice el doctor Amit Goswami. Es un antídoto para la esterilidad moral y el enfoque mecanicista del materialismo científico, y constituye la mejor y más clara perspectiva para comprender el universo. En definitiva, la física cuántica es, de hecho, la teoría de todo. En dieciséis capítulos, Goswami y sus amigos y colegas discuten de qué modo puede influir la física cuántica en nuestra comprensión de: el zen el pensamiento, el sentimiento y la intuición los sueños la reencarnación cuántica el libre albedrío y la creatividad la espiritualización de la economía y los negocios, la política, la educación y la propia sociedad El libro que lo responde todo ofrece gran cantidad de información para todo tipo de personas, que van desde aquellas que puedan estar interesadas en la nueva física hasta aquellas otras que se sientan cautivadas por las implicaciones espirituales de los últimos descubrimientos científicos.
Aun antes de aparecer, este libro ha venido precedido, en todos los medios de comunicación, de una extraordinaria polémica sobre sus conclusiones: que tanto nuestro universo como los otros muchos universos posibles surgieron de la nada, porque su creación no requiere de la intervención de ningún Dios o ser sobrenatural, sino que todos los universos proceden naturalmente de las leyes físicas. En efecto, este libro de Stephen Hawking y Leonard Mlodinow sobre los descubrimientos y los progresos técnicos más recientes nos presenta una nueva imagen del universo, y de nuestro lugar en él, muy distinta de la tradicional e, incluso, de la imagen que el propio Hawking nos había proporcionado, hace ya más de veinte años, en su gran libro Historia del tiempo. En él el gran físico nos explicaba de dónde procedía el universo y hacia dónde se encaminaba, pero aún no podía dar respuesta a importantes preguntas: ¿por qué existe el universo?, ¿por qué hay algo en lugar de nada?, ¿por qué existimos nosotros?, ¿necesita el universo un creador? En los últimos años, el desarrollo de la teoría M (en realidad toda una familia de teorías enlazadas sobre física cuántica) y las recientes observaciones realizadas por los satélites de la NASA, nos permiten ya enfrentarnos a la pregunta fundamental: la Cuestión Última de la Vida, el Universo y el Todo. Si esta teoría última es verificada por la observación científica, habremos culminado una búsqueda que se remonta a hace más de tres mil años: habremos hallado el Gran Diseño.
La palabra «moderno» apunta a la palabra «moderación» y nos dice, por ello, que no es bueno ser «absolutamente» sino «moderadamente» moderno. El título del libro nos dirige así a confrontarnos con una modernidad complaciente que proclama la ruptura con todo lo anterior, particularmente con ese tiempo para el que ella misma ha inventado el nombre de «Edad Media». ¿Qué ha inventado, en el fondo, la modernidad? Ni la revolución técnica, ni la urbanización, ni la sociedad civil, ni incluso la persona como sujeto de libertades... Las ideas modernas no son sino ideas premodernas, maquilladas como una mercancía robada. No se trata de volvernos premodernos, pero sí de tener el coraje de afrontar una «crítica de la crítica». Con su estilo provocativo y con su profundidad y capacidad de análisis, Rémi Brague nos ofrece en esta obra reflexiones incisivas sobre las nociones de modernidad, cultura, historia, secularización, progreso...
El diálogo entre ciencia y religión es una frontera del conocimiento que se caracteriza por su continuo dinamismo. Por una parte, el avance arrollador de la ciencia y de la tecnología abre al conocimiento y la experiencia humana nuevas perspectivas que configuran una forma inédita de percibir el mundo y la vida.Por otra, las preguntas y vivencias de fondo, que son el objeto de la religión, cobran nuevos y variados matices que interrogan a la ciencia y a la sociedad tecnológica. Este volumen trata de responder a algunas cuestiones que cualquier investigador de la ciencia, cualquier aficionado a la tecnología y cualquier creyente inquieto se ha planteado en algún momento. Así, ¿qué queda de sagrado en las cosas y en la vida una vez han sido expuestas a las luces y las sombras de la ciencia? ¿Cómo afectan la ciencia y la técnica a la vivencia religiosa? ¿Qué legitimidad tienen la ciencia y la religión, y qué tipo de plenitudes aportan y de servidumbres exigen? Y, en fin, ¿qué lugar hay para la acción de Dios en el mundo? David Jou es catedrático de Física de la materia condensada en la Universidad Autónoma de Barcelona y prolífico escritor.
Este libro es una invitación a emprender un viaje apasionante: un modo diferente de concebir la ciencia y la religión que vincula ambos campos. Frente a las muchas predicciones de los filósofos de salón y los gurús de los medios de comunicación, Dios no se ha ido, ni tampoco ha desaparecido el interés por el ámbito de lo «espiritual». Hoy es el Nuevo Ateísmo el que suena a rancio y a gastado. La ciencia desde la fe pretende explorar un modo de ver las cosas que se enriquece tanto de la ciencia como de la religión en sus mejores versiones respectivas.
Desde muy joven, Guardini se propuso elaborar un método adecuado a la transmisión de la fe cristiana a unas gentes muy probadas y jóvenes desconcertados por un entorno convulso. A esa tarea consagró sus grandes dotes y una voluntad a prueba de sacrificios. Por eso el tema de la es uno de sus predilectos. Sobre la vida de la fe, Conocimiento de la fe, Existencia creyente, Solo quien conoce a Dios conoce al hombre... Son algunas de l obras dedicadas a describir la experiencia creyente. En este libro se agrupan varios de eso escritos relativos a la fe. En los primeros intenta Guardini pespuntear lo que habrá sido la experiencia religiosa en los albores de la historia de las religiones. Con fina sensibilidad nos ayuda a experimentar los primeros latidos del sentimiento religioso al contemplar la naturaleza y sus sorprendentes fenómenos de luz y sombras, invierno y primavera, el día y la noche...
Suele decirse que la fe cristiana es conforme a la razón y, sin embargo, va más allá de la razón. En este libro, su autor, Robert Sokolowski aborda esta dificultad teológica, pero no hablando directamente de la relación fe-razón, sino examinando la comprensión cristiana de Dios. El acento se pone, pues, no en el hecho de creer y razonar, sino en lo que es creído y razonado. La atención se centra en Dios como creador y en el mundo como creado. El modo en que la fe cristiana entiende la creación hace que la comprensión cristiana de lo divino sea diferente de la comprensión religiosa adquirida por experiencia natural o en otras tradiciones religiosas. El Dios cristiano es diferente al resto de dioses; de ahí que el cristianismo pueda mantener tanto la integridad de la razón como el carácter distintivo de la fe.
El filósofo-teólogo Juan Duns Escoto, llamado Doctor Sutil y Doctor Mariano, es uno de los máximos pensadores del medievo, con profundas visiones de futuro. La celebración del séptimo centenario de su muerte (1308) nos evoca lo que hay de vida y mensaje intelectual en este maestro genial que supo sincronizar el pensamiento profundo con los problemas más vivos de la existencia. Sus tesis filosóficas sobre la persona y el cuerpo humano, sobre Dios como infinito y su original concepto de metafísica, asimismo como sus tesis teológicas sobre el cristocentrismo, la mariología y la moral son de máxima actualidad. Este libro ofrece una apretada y clara síntesis de las principales tesis filosófico-teológicas escotistas y llena un gran vacío en la literatura de lengua española, además de ser una notable aportación al pensamiento escotista internacional.
Un día antes de ser elegido Papa, el cardenal Ratzinger se refirió a la «dictadura del relativismo» como la gran lacra de nuestro tiempo, lo que hizo que muchos pensaran que ese podría ser el título de una encíclica. Pero el tema tenía que ser abordado también desde la filosofía y la teología. A esto responde nuestra obra, que se fija, únicamente, en este problema dentro del seno de la Iglesia. El autor ofrece, en este sentido, sus reflexiones a fin de consolidar unos principios teológicos y antropológicos que permitan fundamentar con solidez las certezas de la fe que han de ser transmitidas.