Religión: general



RELIGIÓ I COMUNICACIÓ
Les comunitats religioses són el que són en funció de la qualitat o manca de qualitat de les seves transmissions. La profunda crisi que experimenten les religions constituïdes no és sinó una de les seqüeles més negatives de la seva incapacitat per establir corrents polifònics de comunicació i empatia entre els seus creients i, en definitiva, entre tots els éssers humans amb inquietuds espirituals. Qualsevol futur saludable i humanitzador de la religió, de la família, de la cultura i de les formes polítiques dependrà d’una manera directa de la salut de la paraula humana i de la seva oportuna contextualització comunicativa en cada aquí i ara. Lluís Duch exposa amb rigor i claredat la creixent importància que adquireixen avui els mitjans de comunicació com a nova estructura d’acollida, en detriment de les tres estructures d’acollida clàssiques (codescendència, coresidència i cotranscendència, és a dir, família, ciutat i religió). Explora també el concepte de tradició, la importància del símbol, la diferència entre informació i comunicació, la crisi de confiança en les institucions religioses, l’acceleració del tempo vital, l’erosió del sagrat i la revolució del creïble.

LA AGONÍA DE CRISTO
Escrita por Tomás Moro poco antes de ser ejecutado, esta obra es un testamento admirable de su autor como humanista y como cristiano. A partir de la contemplación de la Pasión de Cristo, Moro muestra al mundo que el dolor es un ingrediente del amor y la felicidad.

HUMANIDAD DE DIOS,LA
Son muchos los millones de ciudadanos del mundo que se interesan por Dios. Y, sin embargo, son también bastantes los millones de personas que no quieren saber nada de lo divino, lo sagrado, lo religioso. Se ha dicho con razón que la actual crisis de la fe en Dios solo ha podido desencadenarse debido a la forma falseada de pensar a Dios y de vivir la relación con él. Por definición, Dios es el Trascendente. Precisamente porque nos trasciende, Dios no está al alcance del hombre, ni se puede saber cómo es «Dios en sí», porque «a Dios nadie lo ha visto jamás» (Juan 1, 18). Lo que se piensa y se dice de Dios son las «representaciones» que los humanos nos hacemos de él. Pero ocurre que a Dios «nos lo representamos mal». A Dios se le ha representado como infinitamente poderoso e infinitamente bueno. Pero no es posible conciliar ambas cosas, si es que este mundo, donde hay tanto sufrimiento, tiene algo que ver con Dios. Al no poder cuadrar las ideas humanas sobre Dios con la realidad tan calamitosa de este mundo, ha ocurrido lo peor que podía ocurrir: los dirigentes de las religiones y los teólogos o entendidos en los asuntos divinos se han agarrado al poder y han presentado a un Dios autoritario, prepotente, dominador, justiciero, amenazante... En una palabra, han «deshumanizado» a Dios y a la religión. De forma que, tanto Dios como la religión, para muchos, resultan insoportables o, lo que quizás es peor, palabras y problemas que no interesan porque no resuelven nada y para nada sirven. Este libro propone cambiar nuestra idea de Dios y nuestra manera de entender y practicar la religión. Lo cual no es hacerse un «dios a la carta» o una «religión a la medida» de los propios intereses y conveniencias. Se trata de recuperar, hasta el fondo, el significado de lo más original que ha aportado el cristianismo a las tradiciones religiosas de la humanidad: que Dios se ha humanizado en Jesús de Nazaret. Lo cual quiere decir que el «punto de encuentro» con Dios no es ya ni «lo divino», ni «lo sagrado», ni «lo religioso», sino sencillamente «lo humano». A Dios lo encontramos en la medida en que nos hacemos más profundamente humanos, liberándonos ?y liberando este mundo? de la brutal deshumanización que tanto sufrimiento, violencia y muerte ha desencadenado.

JESUCRISTO, NUESTRO SALVADOR
Un libro de iniciación a la Cristología que tiene la finalidad de facilitar a un amplio circulo de personas un mayor conocimiento de la maravillosa riqueza y la profundidad insondable del misterio de Cristo.

ORAR CON EL CUERPO
Santo Domingo de Guzmán no dejó tratado alguno ni una enseñanza explícita acerca de la oración. Pero sus primeros hermanos en la Orden de Predicadores, los dominicos, fueron testimonios de que oraba en todo momento. Eran oraciones repletas de enorme fuer

PROPONER LA FE
Este libro propone felicidad En él procuro proponer la fe católica que tan feliz me ha hecho, de forma que pueda ayudar a otras personas a interesarse por ella para serlo también. Y si lo lograra con una sola, daría el trabajo por muy bien empleado.