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Eribon nos invita a acompañarlo en su genealogía de una ruptura. De eso trató toda su adolescencia: arrancarse del mundo social, familiar, popular y de provincia de cuyos valores y sensibilidades nunca compartió. Un mundo caracterizado por la pobreza, la homofobia y la xenofobia, del que decidió escapar yéndose a vivir su homosexualidad a Paris.
Al contrario que Baroja, rara vez situó Galdós el escenario de sus novelas fuera de España, pero durante una década, la de su plenitud novelística, iniciada con La desheredada y culminada con Fortunata y Jacinta, pasó los veranos recorriendo Europa. Las
Después de la literatura, la segunda patria de José Luis García Martín es el viaje. En sus exploraciones, urbanas y humanas, el reloj se ralentiza y avanza de un modo menos apremiante, ante la oferta continua de novedad y asombro. El viaje es para él la
Dos años decisivos en la vida de Walter Benjamin, 1932 y 1933, estuvieron vinculados de un modo muy especial, y hasta podría parecer que un tanto sorprendentemente, a la isla de Ibiza. Durante aquellos dos años, la trayectoria vital y literaria del escritor berlinés se vio afectada profundamente por una crisis de carácter personal. A su precaria situación económica y a su carencia de expectativas profesionales se sumó muy pronto la irrupción de otra crisis, la de su propio país, con el derrumbe de la economía y el ascenso del nazismo al poder. Como muchos otros, Benjamin se vio obligado a salir de Alemania; en su caso, para no volver jamás. Por lo general, esta página ibicenca de su trayectoria suele pasarse, sin embargo, con bastante rapidez, a pesar de que en ella dejó escritos algunos de sus textos más lúcidos y apuntó motivos y situaciones que se convertirían pocos años después en temas prioritarios de su reflexión. El principal objeto del presente libro consiste en describir las razones que lo llevaron hasta Ibiza.
Las dos grandes obsesiones de Chesterton, el arte y la religión, se reúnen en esta colección de ensayos que nacieron como reseñas literarias. El primer ensayo, dedicado a William Blake, nos da la pauta de lo que pretende Chesterton, reunir biografía con ensayo, descripción con reflexión. No solo repasa la vida y la obra del más singular de los artistas ingleses, sino que investiga la historia religiosa y mágica de Occidente, reflexiona sobre la relación entre temperamento artístico, locura y mística. Esta edición se divide en dos grupos de personajes. Por un lado, los «temperamentos artísticos» (Blake, Lord Byron, C. Brontë, W. Morris, R.L. Stevenson), los «temperamentos religiosos» (Francisco de Asís, Savonarola y Tolstói). Una muestra del mejor Chesterton.