Es código abierto: en cierto modo, al escribir poesía, se hackean las palabras, se les das la vuelta para que digan más de lo previsto, o les das un uso alternativo, les haces decir cosas diferentes quitando aquí y poniendo allá. Y, muy importante: todo poema verdadero es hipertexto puro, cada palabra nos conduce a una red de enlaces, de sugerencias que están por debajo de la palabra escrita o dicha, donde el lector o escuchador puede indagar, dar vueltas, volver al poema varias veces siguiendo vínculos insospechados».El presente libro recoge sus reflexiones sobre la poesía, su escritura, su difusión y su futuro en los tiempos presentes, marcados por las tecnologías de la información y la comunicación.