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La ciencia desempeña un papel decisivo en la sociedad de nuestro tiempo. Conscientes de esta importancia, los medios de comunicación han ido asumiendo el reto de difundir el conocimiento científico de una forma que resulte interesante y accesible para el gran público. Sin embargo, la divulgación de la ciencia presenta algunas peculiaridades que la convierten en una disciplina tan compleja como apasionante. Esta obra trata de ofrecer algunas claves para una divulgación eficaz a través del género documental, uno de los más fecundos en este ámbito. Para ello aborda, de una forma valiente, clara y sistemática, aquellas cuestiones en las que reside la eficacia de la divulgación científica audiovisual , tales como la simplificación de los contenidos, la construcción de relatos audiovisuales y los modos de argumentación que permiten al divulgador llegar con eficacia hasta el gran público. Y en el intento de presentar técnicas y recursos para llevar a cabo la divulgación, se ha buscado el ejemplo de documentalistas de reconocido prestigio, como el británico David Attenborough, considerado como uno de los grandes divulgadores de este siglo, con quien el autor ha mantenido entrevistas de gran interés. Bienvenido León, periodista y doctor en Comunicación Pública, es profesor de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra, donde imparte las asignaturas de Producción Televisiva y Divulgación Científica Audiovisual. Anteriormente, ha sido director de informativos de la agencia Editmedia TV, coordinador de reportajes informativos de Tele 5 y director de la productora Euroview. Desde hace varios años, trabaja también como realizador, productor y guionista de reportajes y documentales para televisión. Sus obras han obtenido importantes premios, como los de mejor documental en los festivales internacionales de Cartagena de Indias (Colombia) y Cuzco (Perú). Es autor de varios artículos científicos y divulgativos sobre comunicación, publicados en revistas españolas y extranjeras.
En primer lugar, la política, derivada de su condición de socialista; en segundo lugar, una vertiente de carácter más intimista y literaria; por último, está la vertiente de cronista, del periodista que traslada la información diaria a sus lectores. La suma de estas tres vertientes hace que a José Padrón Machín (y sus numerosos seudónimos: Cirilo Pérez, Martín Mejías, Daniel Padilla
) se le deba, a lo largo de décadas, haber hecho visible la isla de El Hierro para el resto de las Islas. Además de cronista de la prensa escrita, Padrón Machín asumió la corresponsalía en El Hierro de la oficial Radio Nacional y de Televisión Española, y tanto su voz nasal y su característica imagen, siempre vestido de negro y con abundante melena blanca peinada hacia atrás semejando la más conocida imagen de las sabinas de El Hierro, fueron reconocidas por los canarios de todas las Islas.
Los aspectos moral y periodístico forman un binomio esencial para entender la naturaleza de los acontecimientos en los que se vio involucrado nuestro biografiado, uno de los periodistas más dinámicos de la historia de Canarias y una de las plumas más combativas e influyentes de la prensa conservadora española.
