El órgano de la risa y otros diábolos es un poemario donde Heriberto Yépez condensa muchas ideas que ya aparecen en sus textos críticos y sus ensayos, el género que sin duda ha renovado este autor con libros como Todo es otro, a la caza del lenguaje en tiempos light, Ensayos para un desconcierto y una crítica ficción y El Imperio de la neo memoria. He dicho "ideas" con todo el propósito, pues este poemario apela más a la razón que a la emoción. Lejos de la música y la imagen, recursos que caracterizan a la poesía contemporánea, los poemas de Yépez tienden a lo conceptual: no es el oído sino la inteligencia la que le dicta el ritmo del poema.
«LOS pelícanos de San Juan del Sur, un pequeño pueblo costero del océano Pacífico nicaragüense, planean hasta avistar su presa y de repente se dejan caer en picado. El golpe contra el agua es brutal y siempre salen con el pez en el pico. A Fernando Valverde le asombró la perfección milimétrica de su caza hasta que un pescador le reveló que aquel portento escondía una tragedia enorme. De tanto golpear su rostro contra el océano muchos pelícanos mueren ciegos, perdidos en el horizonte. De todo eso habla este libro, del destino de los pelícanos y de cómo los sueños de la gente normal se estrellan una y otra vez contra la realidad. Lleno de imágenes deslumbrantes, de situaciones límite como la agonía y el sufrimiento, del color y el dolor de la infancia; su autor nos regala estos hermosos poemas, entrañables, muestra de piedad por los otros y despiadados con quien testimonia o recuerda. Hermosos poemas». DARÍO JARAMILLO AGUDELO Fernando Valverde (Granada, 1980) es una de las voces más premiadas y reconocidas de la joven poesía española. A los veinte años escribió Viento favorable, que apareció en la colección Juan Ramón Jiménez. Madrugadas y Razones para huir de una ciudad con frío, este último editado por Visor, fueron sus siguientes publicaciones. Los ojos del pelícano ha obtenido el Premio «Emilio Alarcos» del Principado de Asturias
Cartagena, 31 de Mayo de 1942. Su obra poética está traducida - y algunas de sus novelas - a más de veinte idiomas. Formó parte de la antología NUEVE NOVISIMOS. Finalista del premio PLANETA con El manuscirito de Palermo y de LA SONRISA VERTICAL con La caza del zorro, fue premio de esta última con La esclava instruida. También fue premio BARCAROLA. Su obra poética ha ido construyendo por más de 35 años un libro, Museo de cera (publicado en esta misma colección), en el que se integran títulos como La edad de oro, Nocturnos, Tosigo ardento, El escudo de Aquiles, Signifying nothing, El botín del mundo y La serpiente de bronce. Como traductor se le debe la obra de Konstantino Kavafis, los Poemas de la locura de Hólderlin, la poesía de Robert Louis Stevenson (del que también ha traducido La isla del tesoro y Weir de Hermiston), T. S. Eliot, François Villon y los Sonetos de Shakespeare. Otros libros suyos son sus memorias Al sur de Macao, Naturalezas muertas, La corona de arena (biografía de Lawrence de Arabia) y Desolada grandeza. Fue organizador en 1985 del Homenaje Mundial a Ezra Pound, en Venecia, y en 1990 recibió el Doctorado Honoris Causa por Dowling (New York) por el conjunto de su obra.
Apenas adolescente descubrí el presente eterno que nos ofrece la poesía cuando la voz rotunda de Walt Whitman transformó la biblioteca del Instituto en una pradera salvaje; con García Lorca conocí el tesoro de leer al poeta en su lengua materna y el valor para escribir como quien dibuja sus latidos en un papel. Fue con este impulso como publiqué mi primer libro. Ya en la madurez, me debatía entre la ilusión por ver reunidos mis poemas o rechazar toda pretensión poética y considerarlos como oraciones, de gratitud o para que algo hermoso suceda. La fuerza me vino de un texto de Oteiza, quien afirma que ya desde las cavernas, el Arte no es otra cosa que una trampa que el artista construye para obtener lo esencial, la ?caza? o lo que ésta simboliza, ?el perdón y la gracia de los dioses?.
Para Hans Magnus Enzensberger, poesía y ciencia no sólo tienen raíces comunes, sino que su encuentro a un mismo nivel es prometedor y necesario. Un poeta debe preocuparse por las matemáticas y la química, la medicina y la física elemental si quiere ser tomado en serio en el campo de la literatura. El autor ha reunido en Los elixires de la ciencia poemas de todas sus obras hasta su último libro, Más ligero que el aire, así como otros inéditos. A ellos se añaden siete interesantísimos ensayos, varios de ellos también inéditos.
Benedicto XVI la presentaba como una gran mujer profetisa que también hoy nos habla con gran actuali-dad, con su valiente capacidad para discernir los signos de los tiempos, con su amor por la creación, su medicina, su poesía, su música, su amor a Cristo y a su Iglesia. Es el mismo Papa que la proclama Doctora de la Iglesia y la constituye maestra universal para cuantos buscan la verdad y un ejemplo, de manera especial, para quienes viven el mismo ideal de vida monástica. Es cierto que Dios la adornó con múltiples dones y luces, pero no lo es menos que ella colaboró intensamente para que esos talentos dieran fruto abundante.
En este libro plantea la historia del movimiento psicoanalítico a través de una visión donde el psicoanálisis del Grupo Cero, inaugura sus puntos de anclaje. Una prosa teórica transformada por el autor en un arte poético. Una producción ocupando el escenario de una sexualidad que intercambió los géneros, moviendo en el espacio los puntos de fijeza de la perversión, su cara única, implicándola a través de una "y" con la cultura, con la verdad, con la poesía. Desvirtuación de la imagen. Milimétrica aberración que pervierte la prosa para alcanzar el goce de la escritura, su nombre primero, el que nombra antes del sentido. Este libro que comenzó siendo una respuesta a un pedido, se transformó en apertura de un campo que el autor desarrollará a través de toda su obra y que inaugura con esta publicación en 1978. Poesía y Psicoanálisis, afectaciones mutuas donde la verdad se escapa de las manos y donde los espejos estallan justamente enfrente de los ojos. Instante aquel en que la mirada de aquel que habla las palabras hace desviar nuestra mirada. Se crea así un ritmo, una música que irá nombrando todos los puntos importantes donde la teoría del conocimiento se trasviste sabiamente en ecos que estallan por todos lados haciendo que las palabras nos toquen. Un libro que nos permite entrar en lo humano por excelencia: el amor.
Breviario de medicina imaginaria es un libro de una rara originalidad en el que se aúnan crónica, conocimientos, evocaciones de la infancia, humor y poesía. Dividido en setenta breves capítulos, recoge treinta y tres "enfermedades" (desde reumatismo a miopía, cistitis o hipocondría) en un orden insospechado. Venet no las describe desde un punto de vista clínico, sino como nos las representamos, tal y como se han formado en la imaginación desde la infancia.La idea que Venet nos ofrece de la enfermedad es más humana que científica, con un sentido de la observación y con una ironía que revelan los temores a los que los seres humanos estamos inevitablemente sometidos. Al tiempo logra rescatar los recuerdos, sonidos, olores y sentimientos que desde niños están asociados a las pequeñas dolencias y a lo que entonces eran enfermedades misteriosas.Con la lectura de este Breviario se comprueba que la medicina es mucho más que su realidad médica. En este conjunto en apariencia heterogéneo se descubre una unidad distinta en la que se mezclan razón e imaginación, como si Venet tratara de devolver a la medicina la parte de poesía y de humanidad que no siempre es capaz de conservar.
JACK LONDON (1876-1916) empieza aescribir poesía en mayo de 1897, a los veintiún años de edad. Desde entonces, el proceso lírico, mediante versos sueltos, estrofas y poemas completos, estará presente a lo largo y ancho de su carrera como novelista, ensayista y autor de relato corto. El London más ambiciosamente poético lo encontramos entre 1897 y 1899, cuando a los veintitrés años de edad, ya ha compuesto y publicado la mayoría de sus poemas. La incursión de London en la poesía no es fortuita, sino fruto de una decisión personal, como apuesta profesional, cuando, en mayo de 1897, compone el poema «Effusion», que inicia su corta aunque vibrante carrera poética. En la poesía de London se advierten la diversidad y disparidad de asuntos nacidos del plano más íntimo y existencial de un joven poeta que aspira a hacer de la poesía la herramienta literaria y vocacional con la que convertirse en una figura crucial del promisorio ideal socialista de fin de siècle, puesto que London es consciente de la fuerza e influencia del socialismo como discurso social en los foros y escenarios intelectuales y artísticos de su época. Por la poesía de London transitan motivos y asuntos existenciales, pero también cotidianos, donde la religión, la sociedad, el amor y la historia responden a la actitud de un joven poeta con su cultura, en parte americana y en parte también europea, creando así un juvenil manifiesto literariocon forma de collage lírico, donde una simple anécdota es capaz de entrañar el dramatismo propio de procesos líricos mucho más maduros. En la poesía de London conviven sin fisura el pesimismo y el optimismo, la nota hilarante y el apunte trágico, el suicidio y la euforia, el sarcasmo y la alabanza, como emociones y actitudes de un sujeto lírico que sabe que la poesía, de la nada, crea su propio mundo.
Captan estos Estilitas de Andorra el vapor de la vida vivida en Andorra, su cotidianidad y su extraordinariedad, y al tiempo la cotidianidad y la extraordinariedad de los ?siete poetas? estilitas de Jaume Plensa, en un diálogo entre escultura y poesía en su común camino de búsqueda del alma universal a través de Andorra y de la vida, viaje con ellos y en ellos hacia uno mismo y hacia la respuesta a las cuestiones que con sus reflexiones nos suscitan, llaves para abrir la puerta del alma y encontrarnos a nosotros mismos.
Prepárate para 2019 con el calendario de @Srtabebi. ¡Que empiecen las explosiones! Si necesitas empezar el día con verdades directas al estómago; si has decidido que esta será la semana en que todo cambie; si 2019 será el año en que salgas de la jaula... ¡este es tu calendario! Con el Calendario Indomable de @Srtabebi, 2019 será el año más explosivo. Con ilustraciones llenas de decibelios, este calendario no solo te servirá para decorar cualquier pared o para organizarte la semana. Gracias a las inéditas reflexiones de @Srtabebi, prepárate para que todo empiece a arder.
Los pequeños DETALLES Vivimos vidas rutinarias; todos los días nos levantamos, vamos a trabajar, hacemos la compra y quizá saquemos un rato para ver una película y vuelta a empezar. Y es así, no todos los días ocurre algo extraordinario, aunque a veces pasa, es verdad, pero la vida es una rutina constante que debemos aprender a convivir con ella. Dicen que hay que ser feliz, incluso hay quien dirá que es feliz constantemente, pero yo no me lo creo. La felicidad como constante no existe. Que no os engañen. Podemos tener ratos felices, muy felices o tristes, incluso algunos muy tristes. Debemos empezar a valorar los pequeños detalles de nuestra vida, en ellos sí que radica la verdadera felicidad. A lo largo de nuestro día debemos aprender a valorar esas pequeñas cosas que nos hacen sonreír y que normalmente no nos fijamos en ellas. Un mensaje de «buenos días», el olor a café por la mañana, la caña de cerveza helada al final del día en verano, el beso de despedida de esa persona a la que quieres. Elige tu propio pequeño detalle, hay muchos a lo largo del día, fíjate. Emociónate con lo pequeño, vívelo al máximo, sueña, no dejes de soñar, lo pequeño puede hacerse muy grande. Enamórate, enamórate hasta el infinito, no dejes nunca de sentir.
Para muchos de los pocos que están al tanto de la poesía española y americana, Francisco Brines es, sin sombra de duda, el mayor poeta vivo de la lengua. Pero también y por eso mismo podemos considerarlo un extraordinario prosista. En este libro se recogen dos ensayos sumamente esclarecedores, sobre las relaciones que pueden establecerse entre poesía y pintura gracias al collage, el más breve de ellos y el otro, bastante más amplio, que puede considerarse a la vez una ajustada poética y materia autobiográfica, sobre la propia poesía de Francisco Brines; texto comparable solo en alcance e interés a Historial de un libro de Luis Cernuda. A.L. Francisco Brines (Oliva, Valencia, 1932) es un poeta español, heredero mediterráneo de la lírica de Luis Cernuda y Constantino Cavafis. Encuadrado en el grupo poético de los años 50, ha sido reconocido con distinciones como el Premio Nacional de las Letras Españolas, en 1999, o el Reina Sofía en 2010. Académico desde 2001, está considerado uno de los poetas españoles del siglo XX de más hondo acento elegíaco.
Poema al que Virgilio (70-19 a.C.) dedicó los diez últimos años de su vida e inscrito, siquiera en su origen, en la empresa de reconstrucción nacional acometida por Augusto tras su triunfo sobre Antonio, la Eneida es una recreación literaria de la poesía épica que arranca de Homero. En ella se superponen con maestría diferentes planos, como el relato de las aventuras de Eneas, el héroe troyano que sobrevivió a la caída de Troya -con episodios tan inmortales como el de sus amores con Dido, reina de Cartago-, la identificación con el arquetipo de Augusto y, ante todo, la profundización en los problemas fundamentales de la vida y la muerte, resultando en conjunto una de las obras fundamentales de la cultura occidental.