Toda la información sobre la técnica y práctica de la pintura recogida de manera clara y concisa, en volúmenes básicos, de consulta ágil y fácil manejo, para que usted pueda conocer los secretos de la pintura con cualquier medio.
Estudio de la obra más reciente de Emilia Azcárate centrada en su relación vital con lo espiritual. Se recogen tres cuerpos de trabajo: las Practicables, Postales y la serie de los Gohonzon, donde incorpora procesos, ideas y estéticas ligadas a su vida y a su práctica espiritual, el budismo nichiren. Estas obras se suman a los planteamientos estéticos y conceptuales recurrentes en la obra de la artista, y configuran abiertamente dinámicas ligadas a la abstracción como búsqueda de lo espiritual. «Me inspira la espiritualidad y el budismo es un estado de iluminación que me permite ver las cosas con claridad, se filtra en mi obra, y hay momentos que no distingo entre pintar o practicar, es uno y lo mismo.»
Recetas para pintar paisaje pretende enseñar al lector cómo representar el paisaje natural utilizando técnicas y procedimientos poco frecuentes que dan mayor interés a la obra terminada. Se proponen 10 ejercicios prácticos que se desarrollan paso a paso con explicaciones claras y sencillas, por medio de recursos pictóricos singulares que enriquecen el modo tradicional de pintar, y una sección en la que se experimenta con materiales o sustancias poco habituales para conseguir nuevos efectos.Este libro invita al artista a convertirse en un "cocinillas", que en argot del pintor es aquel que muestra un gran interés por experimentar con sustancias y materiales capaces de enriquecer y añadir mayor interés gráfico a la obra.
Durante más de una década, John Richardson mantuvo una estrecha amistad con Pablo Picasso. Partiendo de esa relación, de sus propios diarios, de la colaboración de la viuda del artista, Jacqueline, y de un acceso sin precedentes al estudio y los papeles del creador de «Les demoiselles d ' Avignon», ha podido llegar a conocer en profundidad a esta figura capital del siglo xx. En este volumen, el segundo de los cuatro que completarán la biografía e ilustrado con centenares de fotografías, Richardson recrea la vida y la obra del artista durante la crucial década de 1907-1917, un periodo en el cual Picasso y Georges Braque inventaron el cubismo. Además de retratar a Picasso como un revolucionario decidido a hacerse con la corona baudeleriana de " pintor de la vida moderna " , Richardson analiza la vertiente más íntima de la vida del artista, su ruptura con Fernande Olivier, sus relaciones con Eva Gouel e Irène Lagut, su amistad con Braque y Apollinaire, sus contactos con pintores, escritores, marchantes y mecenas. Una constante interconexión entre las creaciones artísticas y los datos biográficos, y una brillante contextualización en el efervescente medio cultural de los años anteriores a la Primera Guerra Mundial, permiten a Richardson culminar una biografía destinada a convertirse en un clásico.