Ángel Ayala, como fiel hijo de san Ignacio, vivió entregado a la acción apostólica y mantuvo siempre una intensa dedicación a la interioridad contemplativa. Desde el inicio de su ministerio, buscó con denuedo la formación de sujetos para el apostolado y la labor social. Sabido es que el P. Ayala repetía con calculado tesón pocas ideas, y en ello des-taca la insistencia con que rodea la vida interior y la acción externa del apóstol seglar. Hombre práctico y de extraordinario sentido común, ponía en las virtudes un acento intensivo continuado; algo que contribuye a garantizar, en todo momento, la genuinidad del espíritu evangelizador.
Con la presente edición se pretende perpetuar, en un monumento bibliográfico, la excepcional figura del cardenal Ángel Herrera Oria, director del periódico El Debate, fundador de la Editorial Católica y presidente de la Asociación Católica de Propagandistas y de la Acción Católica española. Su publicación, por tanto, responde a la idea de que no debe seguir desperdigado y prácticamente perdido su inmenso y prolongado magisterio oral y escrito. Es menester concentrarlo para recordatorio y orientación de las generaciones nuevas de la Iglesia española y de la misma España.
Con la presente edición se pretende perpetuar, en un monumento bibliográfico, la excepcional figura del cardenal Ángel Herrera Oria, director del periódico El Debate, fundador de la Editorial Católica y presidente de la Asociación Católica de Propagandistas y de la Acción Católica española. Su publicación, por tanto, responde a la idea de que no debe seguir desperdigado y prácticamente perdido su inmenso y prolongado magisterio oral y escrito. Es menester concentrarlo para recordatorio y orientación de las generaciones nuevas de la Iglesia española y de la misma España.
Catequesis del Papa sobre los Padres, que recogen la última etapa patrística (siglos V-VIII), con un apéndice de cuatro catequesis más sobre tradición y comunión en los orígenes de la Iglesia. Contiene tabla cronológica y mapas.
Este libro recoge algunos pensamientos del papa Benedicto XVI sobre el tema de la familia, sobre la verdad del matrimonio que traduce el designio de Dios sobre el hombre y la mujer y sobre el fundamento teológico de esta unión. La familia, como santuario del amor, de la vida, de la fe, como iglesia doméstica así como escuela de humanismo, como lugar donde se educa e n el ejercicio de la inteligencia, en la libertad de las elecciones, e n el servicio del amor, en el bien de la oración, en la que se espera el florecer de nuevas vocaciones. Son estos los pensamientos que el Santo Padre nos ofrece y sobre los que quiere que reflexionemos en este libro. Mi deseo es proponer el papel central, para la Iglesia y la sociedad, que tiene la familia fundada en el matrimonio. Esta es una institución insustituible según los planes de Dios, y cuyo valor fundamental la Iglesia no puede dejar de anunciar y promover, para que sea vivido siempre con sentido de responsabilidad y alegría. (Benedicto XVI)
Durante varios decenios, Menéndez Pelayo fue considerado en España el autor de los Heterodoxos. Y así se le comenzó a llamar desde que a los veinticuatro años, siendo ya catedrático de la Universidad de Madrid, empezó a publicar su famosa obra. La Biblioteca de Autores Cristianos pone en manos de sus lectores esta cuidada edición de los Heterodoxos en dos volúmenes, enriquecida con las notas que Menéndez Pelayo dejó manuscritas a su muerte. A la luz del estudio final del que fuera autorizadísimo especialista en estos trabajos, Rafael García y García de Castro, el lector contemporáneo puede, a través de esta excepcional obra, ubicar la figura gigantesca de don Marcelino en el triple plano espiritual, doctrinal e histórico.
Tertuliano es un autor que abre caminos: lo mismo que fue el primero en elaborar una teología del bautismo y del sacramento de la penitencia, lo fue también en redactar un tratado de psicología desde la fe cristiana. Su tratado De anima tiene una estructura ordenada, a la manera de los tratados de la época: comienza con una presentación del alma, sujeto del estudio, y concluye indagando en su destino final más allá de la muerte. En la estructura se intercalan a veces ciertas digresiones sobre temas (la metempsicosis, los sueños) que tenían un particular interés para la gente de aquel tiempo. La obra es a la vez didáctica y polémica, pues tiene siempre presentes a los herejes gnósticos, que eran muchos y combativos. Tras los herejes descubre siempre a los filósofos, que los aprovisionan de ideas y argumentos. Como él mismo confiesa, quiso acercarse a los filósofos paganos, que tanto habían discutido sobre el alma, llevándoles las preguntas de un creyente cristiano de aquel tiempo (siglo II-III). No menos de veinte filósofos desde el presocrático Tales de Mileto hasta el medio-platónico Albino van pasando por sus páginas; todo lo cual demuestra que Tertuliano vivía su fe en constante diálogo con la razón. Para defender sus tesis suele ofrecer como argumento final el testimonio de la Biblia; en su búsqueda de la verdad no podía no tener en cuenta el libro que, desde su conversión, era para él la revelación de la verdad. No podemos pretender que nuestro autor se comporte como un intelectual cristiano de hoy que, mientras investiga, pone entre paréntesis su fe; eso habría sido en él un anacronismo. Esta obra puede prestar un servicio a los estudiosos de la primera Patrística, así como a cuantos estén interesados por conocer la aportación del cristianismo al pensamiento y a la lengua de entonces.
¿Cómo comunicar de forma creíble y eficaz la persona de Jesucristo, su Buena Noticia? ¿Cómo evangelizar en un mundo de transformaciones tecnológicas en constante progresión? Este libro plantea muchos interrogantes, obliga a hacernos muchas preguntas sobre el sentido de nuestra misión de comunicadores y desmonta no pocos de los lugares comunes que se vienen repitiendo sobre el impacto de las tecnologías de la información y la comunicación.
Este libro es fruto y resultado de las V Jornadas de Teología organizadas por la Facultad de Teología de la Universidad Pontifica Comillas. El tema de estudio fue el que refleja su título: El pensamiento de Joseph Ratzinger, teólogo y papa. Los distintos capítulos adquieren su unidad interna por el hecho de tocar los puntos centrales de la teología de J. Ratzinger. Con equilibrio y con una cierta sintonía, intentan dar cuenta del pensamiento del actual Papa y ofrecen un recorrido por los problemas fundamentales de la teología actual. Queda así puesta de manifiesto la gran capacidad de Benedicto XVI, teólogo y papa, para captar con profundidad las cuestiones más candentes del debate contemporáneo. Prólogo. Benedicto XVI, un papa teólogo (Santiago Madrigal Terrazas).- Para una interpretación teológica de la escritura. La contribución de J. Ratzinger-Benedicto XVI (Gabino Uríbarri Bilbao).- Mirar a Jesús y ver al hijo de Dios hecho hombre para nuestra redención: la aportación de J. Ratzinger a la cristología contemporánea (José Vidal Taléns).- Deus caritas est: la verdadera moral del cristianismo es el amor (Julio L. Martínez Martínez).- Spe Salvi y la escatología cristiana (Santiago del Cura Elena).- La eclesiología teológica de J. Ratzinger (Santiago Madrigal Terrazas).- El cristianismo y las otras religiones (Pedro Rodríguez Panizo).- Fe y Ciencias Naturales en el pensamiento de J. Ratzinger (Pawel Kapusta).- Teología y liturgia en J. Ratzinger (Mons. Ricardo Blázquez Pérez)
En esta obra de la colección "Pensamientos" del papa Benedicto XVI se recogen las reflexiones del Santo Padre sobre el sacerdocio con motivo del Año Sacerdotal, convocado en honor de san Juan María Vianney en el 150º aniversario de la muerte del Santo Cura de Ars. El Santo Padre recuerda constantemente la dimensión orante en la que el sacerdote, a través de la oración, construye su diálogo con Dios, vive el encuentro con Jesús y recuerda las diversas formas de oración a disposición del sacerdote para alimentar su vida espiritual. Queridos hermanos sacerdotes, Cristo, que es el Camino, la Verdad y la Vida, ha de ser el tema de nuestro pensar, el argumento de nuestro hablar, el motivo de nuestro vivir. (Benedicto XVI)
Esta obra recoge las reflexiones del papa sobre la enfermedad y sobre la situación de quien está enfermo. Son textos repletos de humanidad, sensibilidad y de compasión hacia una experiencia, la de la enfermedad, que suscita interrogantes dramáticos y graves sobre el significado de lo que se está viviendo y sobre el significado de la propia vida. El discurso de Benedicto XVI sirve para restituir la dignidad de la experiencia del dolor e incluye las diversas y urgentes cuestiones que el estar enfermo supone hoy en día: la terapia y los cuidados sanitarios, las necesidades de la persona, la defensa del respeto y de la dignidad de la vida en todo momento.
Dirigido por el recordado profesor y escritor Luis Alonso Schökel, la seriedad científica, profundidad teológica, precisión terminológica, estilo y unción de las colaboraciones que reúne este volumen sobre los comentarios a la constitución conciliar Dei Verbum hacen que continúe siendo actual y que su lectura nos resulte todavía interesante y sugeridora. Además, estos estudios que ahora vuelve a ofrecer la BAC pueden ayudarnos a comprender mejor el alcance y la oportunidad de la más reciente exhortación apostólica de Benedicto XVI Verbum Domini, en la que actualiza y desarrolla el contenido de aquella.
Durante varios decenios, Menéndez Pelayo fue considerado en España el autor de los Heterodoxos. Y así se le comenzó a llamar desde que a los veinticuatro años, siendo ya catedrático de la Universidad de Madrid, empezó a publicar su famosa obra. La Biblioteca de Autores Cristianos pone en manos de sus lectores esta cuidada edición de los Heterodoxos en dos volúmenes, enriquecida con las notas que Menéndez Pelayo dejó manuscritas a su muerte. A la luz del estudio final del que fuera autorizadísimo especialista en estos trabajos, Rafael García y García de Castro, el lector contemporáneo puede, a través de esta excepcional obra, ubicar la figura gigantesca de don Marcelino en el triple plano espiritual, doctrinal e histórico.