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El muntatge és un dels oficis artístics més fascinants i tècnicament avançats, però també un dels més desconeguts, encara que tingui un paper clau, juntament amb el guió i la direcció, en el procés de creació duna obra audiovisual. Pensar, rodar i muntar: tres activitats que sentrellacen i complementen fins al punt que el muntatge es pot entendre com una operació vertebradora que comença en el guió i culmina en la postproducció. El muntatge cinematogràfic, una nova edició augmentada de lobra que ja es va publicar en castellà en aquesta mateixa col·lecció, exposa tots els secrets de la professió, tant les regles teòriques, els recursos de llenguatge, la història i les aplicacions en els diversos gèneres, com els aspectes pràctics, estudiats mitjançant lanàlisi detallada de seqüències. Manual de referència per a estudiants i professionals de laudiovisual, el seu interès va molt més enllà de làmbit tècnic, ja que mostra com el muntatge ha contribuït a fer del cinema una de les arts més completes, poderoses i apassionants.
Este libro es un ejercicio de anticipación a los límites del discurso crítico y creativo, que utiliza las prácticas de nueva institución (red, dispositivos, intermediación, gestión cultural, análisis cuantitativo y cualitativo de datos, accesibilidad, colectividad, normalización, etc.) para averiguar la capacidad creativa de los proyectos artísticos y su alternativa a la definición inmaterial, proyectando la incursión subjetiva en estos soportes, el tipo de forma deviniente en relación a objetivos concretos y cómo el arte se representa a través de ellos. Libro y DVD conforman un objeto artístico de visualización sobre la complejidad de la producción contemporánea y sus posibilidades subjetivas.
This book features forty Western motion pictures, made between 1951 and 1981.? There are classic films of the period, along with some lessrer known gems of the genre.? Stars such as? John Wayne, Steve McQueen, James Stewart, Charles Bronson, Richard harris, Oliver Reed, Hugh O'Brian, Charlton Heston, Henry Fonda, Yul Brynner and Sean Connery are featured, just to name some.? Also included are many photos, complete cast listings, and story synopses.
Las extraordinarias memorias de Christopher Ciccone se basan en toda una vida creciendo, comprendiendo y trabajando al lado de la mujer más famosa de nuestro tiempo, aquella que ha deslumbrado, escandalizado y entretenido a millones de personas durante casi treinta años: Madonna. Desde su infancia en Michigan pasando por su vida en Manhattan a principios de los ochenta, cuando dormía sobre un suelo infestado de cucarachas y bailaba por todas las discotecas de la ciudad, Christopher estuvo con ella en cada paso que dio, viviendo de primera mano todas sus encarnaciones: la niña mimada de papá, la batería punk, la picantona Boy Toy, la «Material Girl», la señora de Sean Penn, la amante glamurosa y hollywoodiense de Warren Beatty, la madre cariñosa, la señora de Guy Ritchie o la gran dama inglesa. Christopher fue así testigo y comprendió todas y cada una de ellas, y conoció a aquellos que pasaron por la vida de la estrella, desde el artista Jean-Michel Basquiat a Gwyneth Paltrow, Kate Moss, Demi Moore y, por supuesto, Guy Ritchie, cuya llegada a la vida de Madonna segó la cariñosa relación entre los hermanos.
La ciudad provinciana es un tema recurrente en la literatura española que también ha estado presente en el cine, especialmente durante los años cincuenta y sesenta. Calle Mayor de Juan A. Bardem es el más destacado ejemplo. El presente libro analiza la imagen de la ciudad provinciana que nos aporta dicha película, poniéndola en relación con otras obras cinematográficas y literarias que han intentado mostrar una ciudad cuyos rasgos esenciales se repiten. Desde la Vetusta de Leopoldo Alas hasta la Salamanca de Basilio Martín Patino, se hace un recorrido por distintas ciudades provincianas que nos ayudan a comprender mejor la película de Juan A. Bardem, cuyo verdadero protagonismo corresponde a un lugar de ficción convertido en símbolo de un país y una época.
A mediados de años 30, cuando todavía predominaba el blanco y negro, las salas de cine comenzaron a colocar en los vestíbulos fotografías con escenas de las películas. Generalmente eran series de ocho a diez fotogramas, que permitían al espectador hacerse una idea de lo que le iban a proyectar. Cuando se trataba de un gran estreno, se coloreaban a mano. Para que resistieran mejor su largo recorrido por los cines de toda España, acompañando a las bobinas de película, se pegaban sobre cartón duro. Se trataba de los fotocromos (en inglés lobycards), que fueron desapareciendo con el auge de las multisalas. Hoy son muy preciados por los coleccionistas. Este en un fotocromo de homenaje gráfico a uno de los grandes clásicos de terror de los años 70, "La naranja mecánica", película Kubrick sobre la violencia social urbana.
