La santidad es una llamada para todos, y todo puede ser un medio de santificación: cada condición personal, cada profesión o trabajo, cada vida; cada camino del mundo, como Emaús, puede llevarnos a un encuentro con Dios. Josemaría Escrivá fundó el Opus Dei siguiendo esta llamada, pero sobre todo la vivió en la vida de cada día, injertado en el Evangelio y a la luz de un continuo y espontáneo diálogo de amor con Dios. Un diálogo que se refleja en los escritos suyos seleccionados en este volumen, que nos invitan a un encuentro personal con Cristo.
El debate teológico y ecuménico surgido con ocasión de la erección de los Ordinariatos personales para los grupos de anglicanos que desean la plena incorporación a la Iglesia Católica, ha impulsado al autor a indagar de nuevo y exponer de manera unitaria la realidad eclesiológica de la Prelatura personal del Opus Dei. El libro que el lector tiene entre las manos es fruto de veinte años de estudio riguroso. El autor, partiendo de investigaciones suyas anteriores sobre la realidad eclesiológica del Opus Dei, vuelve a abordar el tema con un nuevo enfoque, mayor conocimiento teológico y el desarrollo de veinte años más de vida de una realidad apostólica que tiene su sitio auténtico en el Derecho Canónico y que se diferencia de otras realidades nuevas que van surgiendo gracias a la vida de la Iglesia. Desde el año 1928 en que naciera la Obra, se ha trabajado mucho para ajustar su carisma fundacional a la vida y organización peculiar de la Iglesia. En ese tiempo también otras realidades eclesiológicas han ido surgiendo y evolucionando dando lugar a la Iglesia del siglo XXI. En ella el Opus Dei tiene un sitio propio que es el de estar en medio del mundo. Entender en toda su originalidad y profundidad lo que parece a primera vista tan sencillo es parte del objetivo de este libro, además, como siempre, de mostrar toda la riqueza de la Iglesia que no cesa de ser impulsada por el soplo del Espíritu. El libro quiere ser una contribución al esfuerzo de teólogos y canonistas por presentar, en contexto ecuménico, la estructura fundamental de la Iglesia.
Tempus fugit. Todos los sabios están de acuerdo y con distintas voces afirman la brevedad de la vida. Es una realidad más palpable cuando se alcanza una edad mayor; sin necesidad de mirar atrás, se reconoce el peso de los años transcurridos: no es este un tiempo para lamentos y añoranzas, sino la coyuntura favorable, oportunidad única para crecer, ser mejores, amar más, servir con esa experiencia y sabiduría adquiridas en tantos trabajos y avatares, penas y gozos. El hombre es un ser itinerante, su camino arriesgado, alta es la meta por alcanzar: llegar al Cielo es lo que importa. Somos peregrinos del desierto, pero no estamos solos: un caminante misterioso -Jesús de Nazaret- acompaña nuestros pasos. Este libro ofrece un modelo positivo, esperanzado y optimista de la penúltima etapa de la vida. Francisco Fernández-Carvajal, natural de Albolote (Granada), es Licenciado en Historia por la Universidad de Navarra y Doctor en Derecho Canónico por el Angelicum de Roma. Sacerdote de la Prelatura del Opus Dei. Durante más de diez años fue Redactor-Jefe de la revista Palabra. Es uno de los autores contemporáneos de obras de espiritualidad más conocido. En Ediciones Palabra ha publicado Hablar con Dios, del que se han editado más de dos millones de ejemplares. Esta gran obra contiene más de quinientas cincuenta meditaciones para cada día del año. Ha sido traducida al inglés, francés, italiano, portugués, alemán, holandés, rumano, eslovaco, checo, polaco, ruso, esloveno, croata y coreano. Sus dos últimos libros han completado una trilogía sobre Jesucristo: Vida de Jesús, El Misterio de Jesús de Nazaret y Pasó haciendo el bien.
«Así era don Javier. En su corazón sacerdotal cabían todos. A cada uno le hacía sentirse como si solo él existiera en el mundo: tanto en una conversación personal más pausada como en un encuentro fortuito. ¿Qué le movía, cuál era el resorte más profundo que le impulsaba a preocuparse de los demás? La respuesta no puede ser otra: su relación íntima, personal, viva, con Jesucristo, en el Pan y en la Palabra». (Del discurso de Mons. Fernando Ocáriz, Prelado del Opus Dei).
¿Qué rasgos destacan en su personalidad? ¿Enérgicamente bueno o amablemente fuerte? ¿Qué papel jugó en la configuración y expansión del Opus Dei? ¿Cómo asumió la sucesión de san Josemaría al frente del Opus Dei? ¿Cuáles fueron los grandes hitos de su v
Este ilustre médico y padre de familia numerosa amó profundamente a Dios, a la Iglesia y al Opus Dei en cuyo seno se desenvolvió su auténtica vocación cristiana.
Josemaría Escrivá de Balaguer nace en Barbastro, Huesca, el día 9 de enero de 1902.Una mañana de invierno, cerca ya de los dieciséis años, el joven bachiller descubre huellas de pies descalzos sobre la nieve, que pertenecen a un sacerdote carmelita. Tal ejemplo de generosidad y entrega conmueve su alma. Este fue el comienzo de una llamada divina para realizar algo grande que él desconoce, pero que su corazón desea ya con ardor. Por lealtad a Dios, decide hacerse sacerdote y es ordenado en Zaragoza, años después, el 28 de marzo de 1925.El día 2 de octubre de 1928, en la ciudad de Madrid, ve con claridad lo que Dios le estaba pidiendo. Tras la celebración de la Santa Misa, recibe la iluminación de fundar el Opus Dei y la misión de promover la llamada de todos a la santidad, por medio de la santificación del trabajo y de las tareas ordinarias.El día 17 de mayo de 1992 fue proclamado Beato por el papa Juan Pablo II en la ciudad de Roma, donde fue canonizado el día 6 de octubre de 2002.
En los años 60, san Josemaría Escrivá afirmaba en una entrevista: "El Opus Dei salió adelante por la gracia divina y por la oración y el sacrificio de los primeros, sin medios humanos". En estas palabras hay un delicado elogio de quienes siguieron al Fundador en los primeros años, cuando todo estaba por hacer. Uno de ellos fue José María Hernández Garnica. José María Hernández Garnica nació en Madrid el 17 de noviembre de 1913. Doctor Ingeniero de Minas, en Ciencias Naturales y en Teología. Pidió la admisión en el Opus Dei el 28 de julio de 1935. Falleció, con fama de santidad, en Barcelona el 7 de diciembre de 1972. Ejerció su profesión en la Empresa Electra de Madrid. Posteriormente, el 25 de junio de 1944, recibió la ordenación sacerdotal, de manos del Obispo de Madrid Monseñor Leopoldo Eijo y Garay. Después, San Josemaría le encargó especialmente el impulso de la labor apostólica del Opus Dei entre las mujeres, lo que compaginó con otras muchas tareas sacerdotales en Madrid, Barcelona, Valencia, Bilbao, etc. Más tarde, marchó a desarrollar su ministerio sacerdotal en Inglaterra, Irlanda, Francia, Austria, Alemania, Suiza, Bélgica y Holanda. El haber caminado por lugares tan distintos, en continua adaptación a diversas culturas y ambientes, le hace ser un buen ejemplo para la evangelización de la vieja Europa.
¿Fue la vida de Josemaría Escrivá una vida de éxito o de fracaso? Desde esa clave paradójica, José Miguel Cejas, escritor y periodista, analiza la existencia y el mensaje de este sacerdote canonizado por san Juan Pablo II en 2002, conocido en los cinco continentes por ser el fundador del Opus Dei, por sus libros de espiritualidad y por las numerosas iniciativas que impulsó. El resultado es una semblanza amena y documentada, apoyada en numerosos testimonios, recuerdos, fuentes directas y experiencias personales tanto del autor como de otras personas, que muestra la cara y la cruz de san Josemaría, analiza sus virtudes y sus defectos y se detiene en sus respuestas al drama de la pobreza que sufren millones de personas en todo el mundo. El libro se completa con una historia del Opus Dei tras el fallecimiento de su fundador, algunos escritos suyos y un artículo sobre la Prelatura del Opus Dei.