Dos mujeres bebiendo en la barra de un bar. Piden un Martini tras otro. Discuten sobre el sacrificio y el poder de la palabra, sobre el suicidio y el amor. En 1959 las escritoras norteamericanas Anne Sexton y Sylvia Plath se encuentran en el taller literario de Robert Lowell. Durante siete noches, acuden al Ritz en busca de una respuesta: ¿Se puede escribir el poema perfecto si no somos perfectas? En un puzzle de tiempos y personajes donde se desmontan los mitos de la feminidad (matrimonio, menstruación, amor romántico ) este texto mordaz y poético nos invita a preguntarnos qué tipo de éxito les está permitido a las mujeres y qué precio se paga por alcanzarlo. Y como dice Anne, pretende «golpear el estómago del que escucha» sin perder nunca la sonrisa.
La ejemplaridad es siempre conflictiva y ese conflicto admite ser tratado en un registro trágico o cómico. Quiero cansarme contigo, o el peligro de las buenas compañías explota su lado humorístico. Tristán, un abogado de prestigio, a punto de rematar su carrera con un éxito extraordinario, entra en una crisis conyugal severa por los efectos perversos derivados de la mera proximidad familiar de su cuñado, Félix, un individuo sin tacha, bondadoso, servicial, sinceramente tierno, con quien se le compara más de lo que nuestro protagonista quisiera porque el cotejo incesante sólo le depara una copiosa lluvia de reproches. Son, pues, estas inevitables comparaciones, sin necesidad de que el cuñado haga nada concreto, salvo ser bueno, las que despiertan en Tristán un intenso resentimiento y ponen a dos matrimonios al borde del colapso. La trama avanza dando muchas vueltas conforme a las convenciones de las comedias de enredo: equívocos, confusiones, malentendidos, suplantaciones, golpes de efecto. La aparente liviandad de la comedia y su aire de entretenimiento ligero remiten a un trasfondo filosófico que da que pensar: el problema del Bien, que genera a su alrededor más dolor del que solemos admitir. Tristán se lamenta de que desde niños nos previenen con frecuencia contra las malas compañías pero nadie contras las buenas, que pueden ser mucho más perniciosas. javier gomá lanzón (Bilbao, 1965) es escritor de obra filosófica y, últimamente, también dramática. A lo largo de una década publicó Imitación y experiencia (Pre-Textos, 2003), Aquiles en el gineceo (Pre-Textos, 2007), Ejemplaridad pública (2009) y Necesario pero imposible (2013), editados de forma conjunta dos veces bajo el nombre de Tetralogía de la ejemplaridad (Taurus, 2014; DeBolsillo, 2019). Un libro posterior, La imagen de tu vida (2017), centrado en la ejemplaridad definitiva pero póstuma, equivaldría a un quinto tomo de dicha tetralogía. También publicó con la editorial Pre-Textos, en coedición con la Real Maestranza de Caballería de Ronda, su libro Cartas a las Fundaciones españolas (2014). Ha reu-nido sus ensayos breves en Filosofía mundana. Microensayos completos (2016). Es autor también de Ingenuidad aprendida (2011) y ha dirigido el volumen colectivo Ganarse la vida en el arte, la literatura y la música (2012). En 2004, obtuvo el Premio Nacional de Literatura en la modalidad de Ensayo por el primero de sus libros. En lo que atañe a la literatura dramática, en junio de 2017 estrenó en el Teatro María Guerrero de Madrid, del Centro Dramático Nacional, el monólogo Inconsolable (incluido en La imagen de tu vida), el cual, junto a la presente comedia y la obra Las lágrimas de Jerjes, conforman una trilogía teatral titulada Un hombre de cincuenta años. Doctor en Filosofía y licenciado en Filología Clásica y en Derecho, en 1993 ganó las oposiciones al cuerpo de Letrados del Consejo de Estado con el número uno de su promoción. Es director de la Fundación Juan March y patrono del Teatro Real y del Teatro Abadía.
Jerónimo López Mozo es uno de los autores de referencia obligada al hablar de la memoria histórica del teatro español desde la segunda mitad del siglo XX. Comprometido con las nuevas formas estéticas del teatro y con las graves crisis de su sociedad, ha estado con la realidad y la denuncia cuando era necesario denunciar con realismo; se ha colocado en las primeras posiciones del teatro de revisión histórica del siglo XX y participa de técnicas y conflictos dominantes en el siglo XXI. En esta edición se reúnen tres obras, tres personajes femeninos, tres mujeres que padecen la condición de víctimas de los sistemas en los que les ha tocado vivir y que muestran las formas de su rebeldía. Tres piezas que, con estéticas diversas, evidencian los males de un patriarcado opresor, a veces sanguinario, siempre fabricante de víctimas: la india Malinche, la Infanta Margarita de Austria y Ella, la mujer del presente.
Cinco años, desde su llegada a París en 1658, necesitó Molière para imponerse, primero, como autor de éxito y, luego, como comediante del rey: el estreno de " La escuela de las mujeres " (1662) lo consagró definitivamente como el autor del momento en los escenarios cómicos y el preferido por el rey. Su habilidad para concebir o sentar los cimientos en ese lapso de tiempo de dos géneros nuevos, así como sus dotes de estratega de la comunicación, quedan demostrados durante ese quinquenio y otorgan a Molière la posibilidad de exhibir, con sus grandes obras posteriores, su capacidad para convertirse en el comediógrafo del siglo y marcar con su impronta la historia de la comedia en los siguientes. Con Molière suben al escenario preocupaciones que nunca antes lo habían hecho, dando sentido nuevo a una comedia de costumbres cuyo objetivo principal ya no es un divertimento simple, sino que suma, a esa reflexión sobre hechos de la vida social, una carga burlona y crítica que afecta a la vida moral. Aunque la lección de ambas " Escuelas " sería parecida: el amor es un gran maestro " que vuelve inventivo " y enseña a superar cualquier impedimento a la niña más ignorante, frente a los defensores de la rigidez moral opuestos al cambio en los usos sociales, " La escuela de las mujeres " supone, sin embargo, un salto cualitativo en el terreno escénico, no sólo respecto a " La escuela de los maridos " , sino también a la construcción de la comedia como género, superando el esquematismo de la farsa italiana y dando a la comedia el estatuto de pieza mayor.
Los personajes de esta comedia se van a Cancún de vacaciones. Descansarán, tomarán el sol, conocerán lugares nuevos y, al volver, podrán contarlo a los amigos. Pero, inesperadamente, se les plantea allí la gran pregunta. ¿Es eso lo que ellos esperaban de sus vidas, pasar diez días en Cancún con esos individuos, con esa pareja? En la juventud tomamos decisiones de forma bastante irreflexiva. Conocemos gente, nos relacionamos y, un buen día, sentimos que nos hemos enamorado, aunque no sepamos qué significa eso exactamente. Entonces, instalados ya en una noria que no se detiene, seguimos hacia adelante, nos casamos, convivimos, trabajamos, tenemos hijos y, como quien no quiere la cosa, nos damos cuenta de que llevamos veinte, treinta años compartiendo nuestra vida con alguien. ¿Qué habría sucedido si en lugar de casarnos con este o con esta nos hubiéramos casado con aquel o con aquella? ¿Cómo habría cambiado nuestra vida? ¿Seríamos más felices? ¿Sirve de algo preguntárselo?
" Escribí " El puente " en rebeldía contra los temas y las formas de las piezas teatrales de aquella época, cuya escasísima producción, por otra parte, llegaba con timidez a los teatros independientes " . Un joven y rebelde Carlos Gorostiza estrena esta obra en 1949 recurriendo a una fórmula sencilla: como marco temático, un ácido retrato de la situación social de aquel tiempo, con la difícil convivencia de clases y la actitud incierta de la burguesía ante el cambio; como forma de expresión, un lenguaje popular, el habla rioplatense, hasta entonces despreciada por los más exquisitos. El resultado es una poderosa tragedia cotidiana, plenamente instalada en la estética neorrealista de los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial, al igual que " Muerte de un viajante " o " Historia de una escalera " ; " un espléndido drama, admirablemente construido, humano, cargado de interés y eficaz en sus efectos escénicos " , en palabras de Antonio Buero Vallejo, uno de los primeros lectores de " El puente " en España, también el que más hizo por que se estrenara en nuestro país sin que, finalmente, por culpa de la censura franquista, lo consiguiera.
Imagínate en Atenas. Un joven fogoso con las hormonas alborotadas. Se enamora de una esclava. La esclava, lo es de una cortesana. La cortesana tiene un amante. El amante es el hermano mayor del joven fogoso, que quiere hacerle un regalo. A la cortesana. Por eso, le compra un eunuco. Pero aún no se lo ha dado. El joven se entera. De lo del regalo, de lo del eunuco. Y, como acceder a la casa de la cortesana para poder enamorar a la esclava, tarea fácil no es, decide suplantarlo, reemplazarlo. Al eunuco. ¿Te lo imaginas? Imagínatelo. Y, a todo eso, ahora añádele un criado que no quiere, y una criada que no se entera, y un soldadete enamorado de un generalete, y un generalete que no sabe, que duda, que si carne que si pescado, y un cilindro, -bueno, no, un cilindro no. Un hombre, pobre, que así se llama, Cilindro-, y pasillos, súmale muchos pasillos. ¿Lo tienes?... ¡Bien ! Pues, si llegados a este punto, aún no tienes la cabeza hecha un lío, ahí va el acertijo: Todo esto, junto... ¿qué es ? Va, te damos una pista... Drama, no es.
Creador de la comedia en Francia, Jean-Baptiste Poquelin, Molière (1622-1673), entreveró la capacidad de observación, el talento literario y el impulso crítico para alumbrar un género dramático en el que los propios contemporáneos suministraban la materia adecuada para la creación de personajes inolvidables que animan tramas perfectamente estructuradas. El presente volumen reúne dos de sus obras más célebres, muy distintas entre sí aunque con el denominador común de incidir en los nuevos aires " socializadores " promovidos por el reinado de Luis XIV. Si en " El misántropo " (1666) es un atrabiliario miembro de la nobleza el que, enamorado, se " suicida " socialmente en una comedia a la postre sombría, " El burgués gentilhombre " (1670) hace chanza de un burgués enriquecido cuyas ínfulas y cuyo afán por codearse con la aristocracia lo llevan al ridículo. Prólogo y traducción de Mauro Armiño
Introducción biográfica y crítica.1. Vida de Lope de Vega.II. Análisis crítico de Servir a Señor Discreto.Noticia Bibliográfica.Bibliografía Selecta.Nota Previa . de versificación.Servir a Señor Discreto.Acto Primero.Acto Segundo.Acto Tercero.Índice de Láminas.
La vertebración verbal de la dramaturgia de la obra corta calderoniana se compone de las técnicas que hacen derivar dicho material hacia la vertiente del juego humorístico, comportándose como mecanismos potenciadores del significado cómico, pero en su más amplio sentido: la palabra en la obra corta es humor, manipulación lúdica, artificio estilístico y, en fin, espectáculo verbal (acústico y conceptual).(De la Introducción de Evangelina Rodríguez y Antonio Tordera)
Zambullirse en estas páginas no sólo significa descubrir, paso a paso, la historia de la virtuosa Lisbella y el infiel Leonardo, sino palpar el genio y la evolución técnica de Lope. Desde la elección del argumento, basado en una copla de música o romance popular muy conocido desde finales del siglo XV, el quiebro que imprime al tema hasta convertirlo en una refundición original, la asimilación de lecturas recordemos La Celestina-, el acopio de temas de actualidad no pasemos por alto el didactismo postridentino que algunos críticos han visto reflejado en el personaje de Lisbella-, hasta la técnica de suspensión empleada, tan adecuada a la teatralidad, son algunos de los hilos con los que está tejido este tapiz.Fechada antes de 1598, la obra pertenece a la primera época teatral de Lope, la de su aprendizaje y experimentación, y en ella apunta ya, con absoluta nitidez, la maestría del que mereció el elogio de Monstruo de la Naturaleza.La bella malmaridada, ubicada en Madrid, también dará ocasión de encontrar a los amantes de la historia de la ciudad: sus calles, sus barrios, sus ambientes, sus costumbres un largo repertorio de lugares y circunstancias que perfilan el retrato del Madrid de finales del siglo XVI.