En la época en la que surge una de las más ricas expresiones de la cultura europea, la música da forma a una visión del mundo. Gesto, filosofía y lenguaje, la música es también una práctica que se inscribe en el tiempo. ¿Cómo se practicaba este arte en la Edad Media? ¿Cómo se concebía? El propósito de este libro, sintético y fundamental, consiste en hacérnoslo entender, aclarando, con la ayuda de la filosofía tanto como de la técnica musical, las cuestiones con las que se enfrentaron los hombres de aquella época. El análisis del lenguaje musical viene precedido por un estudio sobre la idea y el orden del mundo, y luego se aborda el lugar que ocupa la música en la sociedad. El recorrido global de la época, que abarca diez siglos, se realiza bajo distintos ángulos que permiten aprehender tanto los modos y el ritmo musicales como el papel que desempeña la Iglesia, tanto la importancia de los descubrimientos técnicos como la riqueza teórica de los pensadores (Boecio, Casiodoro...) y la función política que los poderosos (papas, reyes, señores) atribuyen a la música.
Des de la pimera audició a Barcelona, lany 1862, lestètica wagneriana va ser acollida amb entusiasme. El moviment wagnerià lligava amb el modernisme i amb els revulsius estètics duna ciutat alhora, segons els àmbits socials, conservadora i transformadora, altrament trasbalsada per la crisi del 98 i de la Restauració. Lobra de Wagner suscità tant les passions favorables dels afins, com les protestes no menys apassionades dels adversaris, entre els quals es comptaven els partidaris de lescola italiana, que havia de cedir part de lhegemonia que havia exercit fins aleshores en el món de lòpera.
El legado musical de uno de los grandes nombres de la radio. No se puede hablar en nuestro país de radio y música sin evocar a Joaquín Luqui. Su intuición para detectar el éxito, su personal forma de expresarse y su capacidad de comunicar le situaron entre los grandes del periodismo en España. Luqui fue el gran «ilusionador» y referente discreto de toda una generación de profesionales de la radio que hoy pervive. Logró la misma complicidad y cercanía con los oyentes que con los artistas a los que ayudaba a alcanzar la cima. Desde Los 40 Principales y El Gran Musical se implicó en la difusión de los artistas más señalados de nuestro pop. El mensaje de Joaquín logró amplificar la relevancia de nuestra música: Alejandro Sanz se lo reconoce y agradece en primera persona en el prólogo de este libro. A modo de legado aparece 3, 2 o 1, donde Joaquín Luqui relata cómo son los grandes, cómo los ve y qué imagina que sienten. «Si el mundo fuera la mitad de generoso que un fan, sería cojonudísimo». Joaquín Luqui (Magazine El Mundo, 22 noviembre de 2002) Los grandes de la música han dicho...«Hizo la radio en segunda persona del singular: #Porque tú y yo lo sabíamos...#, y eso convertía el mensaje en un diálogo de dos».Luis Merino (El País, 29 de marzo de 2005) «Luqui hacía que fuera un placer ir a la radio. Sé que me entristecerá cuando vaya a España porque me acordaré de él: su pelo alborotado, su gran y cálida sonrisa y su gran interés por nuestra carrera».Jon Bon Jovi «Trascendía lo que hacía, llegaba a la gente por la pasión con la que presentaba. [...] Recuerdo la primera vez que vi a Nirvana en Londres; estaba con él y recuerdo con qué ilusión hablaba del grupo».Luz Casal «Él ha formado parte de esa época mágica que fueron los ochenta. [...] Joaquín fue uno de los estandartes, una de las personas más queridas. [...] Le dio a la gente muy buenos momentos, a los artistas nos ayudó a ser grandes».Nacho Cano «La radio no será igual sin Luqui. Nosotros tampoco. Desde Galicia con amor».Siniestro Total Reseñas:«Una obra editada a partir de un manuscrito recientemente encontrado en el que el famosos locutor, fallecido en 2005, relata experiencias junto a algunas de las figuras más importantes de la industria de la música, muchas de las cuales él anticipó como buen visionario».El Progreso «Las anécdotas más curiosas y sorprendentes de una figura esencial de la edad de oro del pop español se pueden leer gracias a estas memorias inéditas que el periodista navarro, fallecido en 2005, escribió durante 1991 y 1992 y que un amigo halló en su casa».Pilar Manzanares, Diario de Navarra «En 3, 2 o 1... Tú y yo lo sabíamos no hay espacio para la paja, porque el autor habla de un tiempo plagado de grandes estrellas. En él desgrana sus reflexiones y conocimientos de primeras figuras como The Rolling Stones, Michael Jackson, Madonna o Bruce Springsteen sin formular una palabra más alta que otra, como hacía en vida, siempre happy, happy».Agencia Efe
La música és un complement indispensable de les imatges, i, sovint, s'oblida. Aquest llibre reivindica el paper de la música en el cinema i destaca les principals aportacions del llenguatge musical en el setè art.
Las aportaciones más relevantes de los pedagogos e investigadores del ámbito de la educación musical en el siglo XX. Incluye una breve biografía, una referencia a las principales aportaciones teóricas y / o metodológicas y a las aplicaciones prácticas.
Esta antología, ideada para acompañar a la obra 'La música romántica', de esta misma colección, tiene como propósito ofrecer las partituras de todas las obras que en aquélla se analizan en profundidad, al mismo tiempo que servir, independientemente, como una equilibrada colección para los interesados por la música del siglo XIX. A tal fin, el editor abarca ampliamente toda la gama de formas y géneros propios del periodo romántico. La sinfonía está representada por una obra perteneciente al romanticismo temprano y otra de la época tardía; la literatura para piano incluye varias sonatas y piezas líricas breves, y el virtuosismo está incorporado con una paráfrasis de Liszt y un concierto de Brahms. Se incluyen ejemplos de música de cámara, poema sinfónico y oratorio. El lied está presente en la selección con obras de Schubert, Schumann y Hugo Wolf y la ópera está pródigamente representada mediante fragmentos de obras maestras de Rossini, Wagner, Verdi y Musorgsky. En cada una de las treinta y ocho selecciones de esta antología, se ha reproducido la mejor de las ediciones actualmente disponibles. El profesor Plantiga ha incluido piezas completas allí donde los límites del presente libro lo han permitido; sin embargo, dadas las grandes proporciones de muchas de las obras decimonónicas, ello no siempre ha sido factible. Todos los textos vienen recopilados al final de la obra, traducidos al castellano, y acompañados en algunos casos en el idioma original. Hoy en día, cuando la música del siglo XIX continúa predominando en los teatros de ópera y salas de concierto en todo el mundo, esta antología, práctica y bien diseñada, será un ejemplar bienvenido por los estudiantes, profesores y amantes de la música
La preparación de ediciones para la interpretación y el estudio es una de las actividades y contribuciones más importantes del especialista en música a la vida cultural. A través de ediciones accesibles, la música previamente desconocida entra a formar parte del repertorio, mientras las obras conocidas son objeto de nuevas interpretaciones. Este es el primer libro que proporciona una introducción a los métodos de la crítica textual y a sus aplicaciones en la edición musical, al tiempo que ofrece una historia de este campo, y una discusión de las cuestiones y problemas encontrados. En este volumen, James Grier examina los principales temas de la edición musical y desarrolla un marco teórico para una metodología crítica, proporcionando ejemplos que van desde el repertorio de la música antigua a las obras contemporáneas, e incluyendo diversos géneros, desde la ópera a la sinfonía. El autor también examina el futuro de la edición musical y sus aplicaciones en CD-ROM y otros medios electrónicos. El libro atiende a las diversas actividades inherentes a la edición musical, incluyendo las tareas del editor, la naturaleza de las fuentes musicales y la transcripción. Grier también examina las difíciles decisiones a las que se enfrenta el editor, por ejemplo con las fuentes no asociadas con el compositor y el necesario juicio editorial.
Este libro trata sobre los músicos, sobre todo lo que hay alrededor de ellos, su formación tan prematura y excepcional, la relación entre el profesor y el alumno, la que existe entre el músico y la sociedad, su familia, su pareja o sobre el fascinante vínculo de amor-odio que surge entre él y su instrumento. Pero también profundiza en la vida interior del músico, en las interminables horas de soledad a las que se ha de enfrentar, en las características de su personalidad, sus aspiraciones, sus fantasmas interiores, la presión que sufre ante un concierto o sobre las causas de sus esperanzas y de sus decepciones.
El presente libro ofrece una historia del devenir de la música occidental, no sólo de sus grandes compositores e intérpretes, sino también de los cambios que han ido experimentando las ideas en torno a su esencia y su función. al hilo de este planteamiento, el autor sugiere hasta qué punto esta evolución es reflejo del desarrollo de la concepción humana del tiempo. Escrita con claridad y rigor, sus veinticuatro capítulos constituyen una lectura esencial y esclarecedora para estudiantes, profesores y amantes de la música en general.
Este libro recoge el resultado de largas horas de conversaciones entre Antonio Vega y Juan Bosco, en las que el artista desgrana sus opiniones e inquietudes, así como su particular visión del mundo que lo rodea. Los textos, en los que se incluyen letras de canciones inéditas de Antonio, van acompañados de fotografías de su entorno más próximo, tanto familiar como de sus amistades, cedidas especialmente para este libro.
A mi alrededor se apilaban los discos donde ese inscribían los fragmentos de esta materia prima descompuesta, encogida y agrandada, destripada, invertida, estallada y pulverizada. Me sentía como un niño que ha abierto su oso de peluche y le ha vaciado el serrin, que le ha arrancado los ojos a la muñeca y roto en mil pedazos el tren de cuerda. Tenía que confesarme a mi mismo que acababa de inventar unas técnicas de destrucción extraordinarias, pero que todos los intentos de sintesis habían sido un rotundo fracaso. Por otro lado, a cada nuevo paso que daba surgían unas contradicciones feroces. Los objetos sonoros proliferaban, pero su insensata mulitiplicación no aportaba enriquecimiento alguno, al menos en el sentido en que lo entienden los músicos: la idea musical , o la sombra de la idea que permanecía la fondo de estas contorsiones, no cambiaba en absoluto, !y para eso tantas formas retorcidas, tanta variaciones concretas! Las mismas variaciones eran contradictorias, demasiado musicales al tiempo que insuficientemente musicales. Demasiado, porque persistía la banalidad de la escritura inicial; e insuficientemente, porque la mayoría de aquellos objetos sonoros eran crueles, ofensivos para el oído.¿Tendría que renunciar?. Aunque dos años más tarde se hiciera evidente que el origen de una parte de aquellas contradicciones era perfectamente inteligible, ¿cómo verlo entonces, cuando se está pasando por la experiencia? La paradoja era que ya hacía dos años que practicaba la música concreta sin haberla descubierto todavía. Había encontrado modos de operar, era capaz de manipular, y, sin embargo, en el plano teórico estaba muy lejos de alcanzar ese punto. Era prisionero de mis surcos cerrados. Hay una famosa canción de Édith Piaf que ilustra el surco cerrado. Antes de ser un método, apareció como un truco, un efecto sonoro. Pero de efecto puede pasar a causa y a medio de descubrimiento. Éste último se resume en una diferencia simbólica: la diferencia entre la espiral y el círculo. Sucede que la máquina de grabación de sonido es una mecánica que dibuja su propio simbolo. La espiral de la grabadora no sólo es la realización material, sino también la afirmación del tiempo que pasa, que ha pasado, que no volverá nunca. Cuando la máquina cierra sobre sí misma este círculo mágico, peuden suceder dos cosas: o bien es un accidente, y el despistado operador pensará al darse cuenta que la máquina está estropeada, pues ha rayado el disco hasta el alma (todos los discos tienen un alma metálica, a la que se llega en cuanto se atraviesa la fina capa de barniz); o bien lo habrá hecho adrede el propio operador, quien levantará hábilmente la grabadora en cuanto el surco se haya mordido la cola, aislando así un fragmento sonoro sin principio ni fin, un estallido de sonido aislado de todo contexto temporal, un cristal de tiempo con las aristas vivas, de un tiempo que no pertenece ya a ningún tiempo. En la lectura, el surco cerrado puede comenzar en A, B, C, o D. Pero enseguida se olvida este principio, y el objeto sonoro se presenta en su totalidad, sin principio ni fin.Cuando Rabelais, mostrando un rasgo extraordinario de genio inventivo, se imagina en Pantagruel las palabras congeladadas, hace algo más que prefigurar la grabación de sonido. Maldiciones y gritos, relinchos, el entrechocar de las armas, palabras soeces y alaridos de terror se aislan y se endurecen, separadas de la historia, para amontonarse, congeladas, en un caos de olvido. El calor de una mano las derrite; las lanza como si fueran piedras. No sólo se trata de la restitución del tiempo pasado, sino también de su estallido. Según el humor de Pantagruel, los mil pedazos de sonido compondrán una sinfonía diferente, no en el orden en el que se sucedieron, sino tal como los toma la mano, en el orden que se le impone.
"Dramaturgia de una pasión" se puede considerar un auténtico manifiesto de la dirección artística de un teatro de ópera. Escrito al final de su etapa parisina, el autor analiza el cargo como un auténtico compromiso intelectual que, lejos de la pura gestión, debe tener como misión principal concebir la temporada operística como un todo coherente. Por eso, la selección de los títulos no está regida por el azar o por el simple gusto del público, sino que es fruto de un complejo proceso en el que deben tenerse en cuenta factores como las voces, la puesta en escena, el contexto histórico-cultural de la ciudad y el país que acoge la representación, el autor y, por encima de todo, la obra en sí. Y todo ello partiendo de la base de que el operístico es un género claramente urbano y «obligatoriamente» político, que no sólo debe producir un goce estético, sino conmover al espectador (que no tiene, por tanto, un papel pasivo sino activo), remover su conciencia, propiciar la reflexión. Además de incluir un capítulo sobre la evolución del espacio arquitectónico del teatro de ópera, en sus páginas se ponen de relieve sus principales (y polémicas) ideas: alejamiento de la figura del divo, mucha atención a la ópera del siglo XX y a la creación contemporánea, poco interés por el belcantismo y el verismo, posicionamiento a favor de los montajes escénicos «no historicistas»
La música de Iberoamérica es un fiel reflejo del carácter dinámico de la naturaleza humana. Su forma, melodía, ritmo e instrumentación han estado marcados históricamente por la transformación constante producida por la mezcla interétnica de creencias, sonidos y símbolos, e influida poderosamente por la combinación de prácticas sociales preexistentes que generan nuevas estructuras, objetos y prácticas sonoras en un constante devenir de cambio y continuidad. En este contexto de identidad multicultural, "A tres bandas" ofrece, de la mano de 23 prestigiosos especialistas, un completo panorama de la compleja realidad de la música latinoamericana, fruto de cinco siglos de mestizaje, sincretismo e hibridación. De Argentina a México, de la música de salón a las expresiones musicales de los mapuche, de la zamacueca al rock, se invita al lector a realizar un apasionante viaje a partir de dos ejes fundamentales: un repaso histórico y crítico de la mezcla de razas, creencias y fusiones ocurrida en la convergencia de las culturas africana, indígena e hispánica, y el resultado de dicho proceso en las ciudades, instrumentos y prácticas sociales vinculadas a la música. El libro se acompaña de un CD con 25 ejemplos que ilustran los contenidos del texto.