Peter Lindbergh fotografió a las grandes musas de Dior, con Marion Cotillard y Charlize Theron entre ellas, y firmó campañas para Lady Dior y J'Adore con su estilo inimitable. A lo largo de su carrera, el fotógrafo fue uno de los colaboradores más cercanos de la firma. Este último libro fue un proyecto conjunto muy especial para el artista y para nosotros.Setenta años de historia de DIOR proyectados contra la efervescencia de Times Square, Nueva York: con esta idea extraordinaria en alcance y dimensión, Peter Lindbergh logró que DIOR, en una decisión insólita, accediera a que un número sin precedentes de sus prendas más valiosas salieran de su depósito en París y viajaran al otro lado del Atlántico.El resultado es eléctrico. En medio del frenesí de Times Square, Alek Wek luce el inmaculado traje de cóctel de 1947, un histórico conjunto de DIOR. En espontáneas escenas callejeras, las modelos Saskia de Brauw, Karen Elson y Amber Valletta se mueven entre la multitud y los andamios, se reflejan en las fachadas de los edificios y se envuelven en alta costura, desde piezas cosidas a mano por Christian Dior hasta diseños más recientes de Maria Grazia Chiuri. Las imágenes son suaves e incandescentes al mismo tiempo; el monocromo característico de Lindbergh y las fotografias en color destacan magistralmente las complejidades, siluetas y texturas de cada prenda.El propio Lindbergh está presente en todos los aspectos de esta publicación en dos volúmenes diseñada por su colaborador y amigo Juan Gatti. El volumen uno presenta 165 imágenes inéditas de esta sesión de fotografías de cuatro días de duración, e incluye una introducción de Martin Harrison. El volumen dos rinde homenaje a la profunda relación de Lindbergh con la casa parisina, y selecciona más de 100 de sus fotografías de creaciones de DIOR, desde alta costura hasta prêt-à-porter para hombres y mujeres, que se publicaron inicialmente en algunas de las revistas más prestigiosas del mundo, como Vogue y Harper's Bazaar. Un extraordinario homenaje a dos pilares de la moda y la fotografía y a su colaboración atemporal.
¿Quiénes son estos insólitos corsarios de guante amarillo ? Pues, los dandys británicos William Beckford of Fonthill, también llamado «Beau Satan», Lord Byron y Oscar Wilde?cómo no?, y los hispánicos Antonio Hoyosy Vinent y Luis Cernuda. Nosotros creemos conveniente añadir a esta galería de personajes peculiares al propio autor, Luis Antonio de Villena, quien confiesa aquí al curioso de leerlo : «El dandysmo, como tema, me ha obsesionado siempre. (He sido un niño triste y de corbatas lila.) Pero, en unos años, constituyó para mí como un ?trabajo?, como un obligado camino en la autoexposición».Los textos que animan ante nosotros estos relatos, y comentan ?con medido, pero incuestionable ardor, por cierto? esa actitud vital y espiritual de singularidad y diferencia que el dandy de ayer y de hoy reclama para sí, fueron escritos entre diciembre de 1973 y enero de 1982 ; hoy corregidos, fueron publicados en su momento como artículos y prólogos a otros libros. Reunidos aquí, «conforman un libro a la vez plural y unitario» ?según palabras del propio Villena?, que se propone como indicador de sugerencias para la educación ética y estética del individuo que siente la apremiante necesidad de saberse inmune a modas corrientes, tendencias, usos y costumbres, «distinto» entre gentes uniformes, ante todoél frente a la tentación constante de la masificación y el aborregamiento. Ese hombre «otro», que cuestiona, a veces tan sólo con su mera presencia, cualquier situación o circunstancia vulgar, es el dandy.