Misticismo, magia y rituales



DIFERENCIA Y REPETICIÓN (DELEUZE, GILLES)
¿Por qué hay diferencia y no solamente repetición, copia, mimesis?, o lo que es igual: ¿por qué hay libertad de creación en el mundo y no sólo sujeción a la representación? En este libro, casi un tratado sobre el tema, se practica una autopsia exhaustiva de la cuestión a través del análisis de la historia de algunos conceptos filosóficos: la diferencia y la repetición, lo mismo y lo otro, lo idéntico y lo dispar. El proyecto del autor no consiste únicamente en generar un “efecto de saber”, sino en afirmar la diferencia, liberándola de los límites que le impone la representación, para transformar el pensamiento en una actividad libertaria. Si se restaura la potencia de la diferencia, lo “problemático” es aceptado entonces como una condición de la vida y un estado del mundo y no como error o residuo eliminable. Por eso mismo, se le hace imprescindible a Deleuze develar las relaciones que vinculan la diferencia a la intensidad y el acontecimiento vitales tanto como la repetición a la jerarquización identitaria, pero también pensar su mutua pertenencia. Si recordamos a Gilles Deleuze como un pensador fundamental del siglo, es justamente porque en cada uno de sus libros la filosofía fue celebrada como un arte del pensar y practicada como una política libertaria del pensamiento.

EL ARTE HERMÉTICO AL DESCUBIERTO (EUGENIO FILALETEO)
Eugenio Filaleteo, que se confiesa a si mismo discipulo de Cornelio Agrippa, es uno de los autores más lúcidos del hermetismo occidental y, al decir de algunos, quizás el último adepto reconocido del que tengamos noticia. La obra empieza con la aparición a nuestro autor de la Naturaleza, figurada como una bella dama, en el entorno de un paisaje onírico y fascinante.

ÁRBOLES, GUARDIANES DE LA MAGIA (NEWMAN, ALEX)
No toda la magia ha desaparecido del mundo. Hay algo en la tierra que emerge y llena el aire donde las hojas de los árboles se confunden en la niebla o refulgen bajo el sol ardiente. Algo que se transmitió a los primeros seres humanos cuando bajaron de las ramas y empezaron a andar, algo que se llevaron con ellos cuando volvieron a los bosques primigenios...Hay árboles que señalan el cielo, otros que se inclinan hacia las profundidades, hay árboles de fuego y los hay de agua, hay algunos venenosos, egoístas, y otros generosos, que abren las ramas para ofrecernos sus dádivas con deleite. Pero los que más me gustan son los árboles con memoria, los que han vivido episodios turbulentos, los que esconden el recuerdo de la magia que un día dominó el mundo y que otro día desapareció para siempre.CONTENIDOS La Acacia, el triunfo de la diversidad; El Acebo, cobijo de hadas en invierno; El Mirto, árbol de las fragantes hojas; El Olivo, la luz de los templos; La Palmera, hierba- árbol de la vida; El Pino, la respiración de la tierra;...