Movido por la penuria económica, Poe entregó un primer borrador de El Cuervo a su amigo George Rex Graham, pero se limitó a darle quince dólares por compasión sin publicarlo. Sí lo hizo el Evening Mirror, en enero de 1845, presentándolo como "una obra inigualable en la poesía inglesa", pronosticando que "se fijará en la memoria de quien o lea". Edición bilingüe de Enrique López Castellón, con las ilustraciones inéditas de Francisco Bores. En esta edición añadimos además las traducciones realizadas por Charles Baudelaire, Stephane Mallarmé y Fernando Pessoa.
En esta guía os ofrecemos 50 rutas para conocer el Parque Nacional de Guadarrama y su entorno, desde los tranquilos paseos familiares hasta las primeras experiencias en alta montaña. Cuando hablamos de Madrid difícilmente pensamos en paisajes naturales de excepcional belleza y eso es, justamente, lo que tienen los habitantes de esta gran ciudad a no muchos kilómetros de sus casas. La sierra de Guadarrama es un privilegiado refugio de diversidad, que en junio de 2013 fue declarada Parque Nacional. De su paisaje destacan los circos y lagunas glaciares, como la de Peñalara; roquedos graníticos, como la Pedriza de Manzanares, y los extensos pinares. Con estos itinerarios, os adentraréis por unos paisajes únicos a muy poca distancia de la capital. La sierra de Guadarrama: tan cerca, tan imprescindible.
El propósito de la presente obra es dar a conocer la génesis y desarrollo histórico artístico de uno de los edificios palaciales más singulares del siglo XVII que posee Madrid, y que en la actualidad es sede del Consejo de Estado y de la Dirección de Acuartelamiento del Ejército. El Palacio de Uceda ha sido habitado por personajes singulares y ha albergado diversas instituciones desde su creación. Además, debido a su particular ubicación, vecina al antiguo Alcázar, ha sido protagonista y testigo de numerosos hechos históricos de gran importancia para la nación. Al mismo tiempo se realiza un análisis de su entorno urbano y de los cambios que ha experimentado el mismo a través de los siglos hasta alcanzar el aspecto que tiene hoy en día.
ndanzas castellanas vio la luz en 1918. La obra seguía una estructura similar en apariencia a las guías excursionistas del momento. Tras una Invitación inicial, que viene a ser una declaración sobre el contenido y los objetivos del libro, se suceden cuatro capítulos que responden a las cuatro zonas geográfico-administrativas que conforman el conjunto territorial descrito. Cada uno de ellos comprende varios subapartados en los que aparecen las jornadas de viaje y los monumentos artísticos y naturales que deben visitarse. A partir de aquí Meliá incorpora relatos sobre experiencias vividas, personajes reales, nombres y lugares, tejiendo así la urdimbre de un maravilloso libro de viaje. Los registros que maneja son múltiples, desde la confesión personal hasta reflexiones sobre la naturaleza, pasando por la anécdota o la crítica social y política. Por otro lado, sus valores literarios son muy relevantes, tanto por lo que hace al equilibrio de la composición, conseguida mediante una mezcla de costumbrismo, agilidad narrativa, notas de humor y contenido lirismo, como por la enorme agudeza de observación en la descripción de personajes populares o de escenas de la vida cotidiana. Destaca también su vena cómica, el lirismo y el uso de figuras literarias para pintar el paisaje. Andanzas nos muestra igualmente a una persona de amplia y heterogénea formación en geografía, historia, literatura... Su concepción del paisaje es la propia de quien lo considera una realidad viva y dinámica, lo que, por otra parte, le permite llevar a cabo una labor de denuncia tanto de la falta de iniciativa del Estado como del fanatismo y la incultura que dominan entre los hombres del campo o de la prepotencia de la nobleza y los terratenientes rurales. Andanzas castellanas es, en definitiva, una ardiente defensa de la naturaleza y de la sierra castellana, de sus paisajes y sus habitantes.
debe suponerse (entre otras cosas porque la edad del autor no augura ya grandes festivales) que este será uno de los últimos libros con esta composición interna: ensayos hermenéuticos de temas diversos, los cuales sin embargo contienen, no sólo en el pró
" Madrid. Acuarelas de viaje " reúne más de 80 acuarelas realizadas en las calles y los jardines de Madrid por el madrileño Fernando Blasco a lo largo de más de cinco años. A estas bellísimas ilustraciones acompañan los inspirados textos de Pepo Paz, que realiza, a través de una serie de itinerarios que comienzan en la Puerta del Sol -la «zona cero» de cualquier visita turística a Madrid-, un recorrido por la historia y el urbanismo de esta ciudad en la que reside, y bajo cuya escrutadora mirada va desgranándose el devenir de sus gentes, calles y plazas, edificios, fuentes, palacios y conventos. Las acuarelas de Fernando Blasco son un viaje hacia la memoria de Madrid. Descubren una ciudad de perspectivas insospechadas repleta de exuberantes arquitecturas, de plazas recónditas, de fachadas evocadoras y de fuentes monumentales. Sus acuarelas bosquejan una ciudad en permanente transformación. Buscar a Madrid en Madrid. Y hacerlo desde los vestigios más antiguos hasta la ciudad del siglo XXI. Una tarea singular y atrevida. Un cuaderno de viaje repleto de acuarelas y anécdotas. El libro está estructurado en varios capítulos: El Madrid de los Austrias, Barrio de las Letras y Lavapiés, El Madrid ilustrado, De Cibeles a Moncloa, El Manzanares y la Casa de Campo, El Madrid moderno, Otros barrios, y concluye con un glosario en el que se describen los monumentos y edificios que aparecen en las ilustraciones.